La llegada de Hazard al Real Madrid se convierte en un fichaje belga más que aterriza en tierras madrileñas. En los últimos años, hasta seis jugadores de Bélgica, contando al ex del Chelsea, han jugado en algunos de los equipos de la Comunidad de Madrid en LaLiga en la última década.

El primero, y vistiendo dos camisetas, fue el portero Thibaut Courtois. El ex del Genk llegó al Atlético de Madrid en julio de 2011. A las órdenes de, primero, Gregorio Manzano y, después, Simeone disputó un total de 154 partidos, en las tres temporadas que estuvo en el Vicente Calderón cedido por el Chelsea.

En la temporada 2012-13 ganó el Trofeo Zamora, como portero menos goleado de la Liga. Consiguió la Europa League y Supercopa de Europa en 2012, la Copa del Rey en 2013 y la Liga en 2014. Además, disputó la final de la Champions League ante el Real Madrid en Lisboa.

Tras su paso por el Chelsea, volvió en 2018 a Madrid. En esta ocasión para jugar en el rival de su ex equipo, el Real Madrid. Algo que no perdonan los aficionados del Metropolitano. La temporada pasada jugó 35 partidos con la camiseta blanca y encajó 47 goles.

El segundo belga en llegar a un equipo madrileño en la última década fue Toby Alderweireld. El defensa aterrizó en agosto de 2013 también en el Atlético de Madrid, procedente del Ajax, a cambio de siete millones de euros. Estuvo una sola temporada y jugó 22 partidos. Marcó dos goles y en su palmarés consta la Supercopa de España de 2014, que la ganó una semana antes de marcharse al Southampton.

El Atlético también se hizo con los servicios del tercer jugador nacido en Bélgica que fichaba por un equipo madrileño en las últimas temporadas. Se trata de Yannick Carrasco y llegaba procedente del Mónaco por un coste de unos 17 millones de euros en julio de 2015.

Aterrizó en Madrid como un jugador joven, desequilibrante y con un futuro prometedor. Sin embargo, tras tres temporadas y 122 partidos, se despidió del equipo de Simeone aceptando una gran oferta económica del fútbol chino.

Otro belga que jugó en LaLiga en la última década en un equipo madrileño fue Wanderson. De origen brasileño y con nacionalidad de Bélgica fichó por el Getafe en 2015 procedente del Lierske belga. Disputó 21 partidos y se marchó libre, como llegó, al RB Salzburg en 2016.

El último en sumarse a esta lista, antes de la llegada de Eden Hazard, fue Giannelli Imbula. Fichó, en calidad de cedido, por el Rayo Vallecano en 2018. Es un caso curioso porque fue llamado por la selección de República Democrática del Congo y de Francia y se decantó por los franceses, con la que debutó con la sub-20 en 2013. Hace un mes decidió jugar con el Congo la Copa de África, pero problemas con la autorización de la FIFA le impiden disputarla. No obstante, nació en Vilvoorde (Bélgica).

El resto de equipos españoles también han fichado a algunos jugadores de esta nacionalidad como Bongonda (Celta), Bakkali (Valencia y Deportivo), Vermaelen (Barcelona), Ogunjimi (Mallorca), Lamah (Osasuna)...   Eso sí, no tantos como los que han preferido jugar en Madrid.