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Una estadounidense regresa con su familia a España por amor y ensalza una de nuestras cualidades: el ejemplo es el “cumpleaños feliz”

Emily San José trabajó de au pair en España, lo que le llevo a enamorarse de nuestra vida familiar y de la sencillez de la vida en nuestro país.

Beto V. Álvarez
Una estadounidense regresa con su familia a España por amor y ensalza una de nuestras cualidades: el ejemplo es el “cumpleaños feliz”
@mamainmadrid_ / Instagram

España tiene una gran tradición familiar. A diferencia de otros países y culturas, nuestro país cuenta con un modelo familiar extendido, en el que la vida de abuelos, nietos, sobrinos e hijos se entremezclan de vez en cuando para, utilizando cualquier actividad como pretexto, pasar tiempo juntos y disfrutar de la compañía.

En Estados Unidos, por ejemplo, no es así. Según Emily San José, oriunda de Oregón y cofundadora de Mother Euro, la cercanía familiar es una de las cosas más sorprendentes de nuestro país, y uno de los principales motivos que le llevo a regresar a vivir aquí.

Ella admite el modelo estadounidense se basa en unidades familiares muy pequeñas en la que, si bien se puede construir muy buenas relaciones, no se suelen relacionar con sus abuelos, tíos o primos, más allá de un par de veces al año.

En España, por el contrario, existe una familia mucho más extendida. Casada con un español, y madre de dos hijos de 3 y 7 años, así como de un hijastro de 16, Emily vive a las afueras de Madrid y todos los domingos va a comer a casa de su suegra.

“No es algo formal ni elegante, tan solo es una oportunidad para pasar horas juntos cada semana. Es una cita fija y lo consideramos una prioridad” explica Emily.

Pero no es solo una cuestión de relación, sino también de ritmo. Desde su llegada a España, Emily aprovecha más los días. Si bien al principio le costó adaptarse al pausado ritmo de la vida española, admite que la extensión de las horas le ha permitido construir una nueva perspectiva de vida.

“En España mis hijos pasan mucho tiempo en el colegio haciendo actividades, y pueden pasarse jugando en la calle hasta la 1:00 de la mañana, lo que me permite pasar tiempo con mis niños, además de satisfacer mi necesidad de conexión social” comparte Emily.

Productividad ante todo

Sin embargo no toda su actitud ha cambiado. La cofundadora de Mother Euro admite que sigue teniendo un cierto grado de obsesión con la productividad, aprovechando por ejemplo el tiempo de la comida en el trabajo para ir al gimnasio, hacer la compra o incluso crear contenido en sus redes sociales.

Según ella la necesidad de estar continuamente haciendo cosas es “muy americana”, lo que de vez en cuando ha entrado en conflicto con la actitud improvisadora de nuestro país. Sin embargo, esa sencillez tan característica de España y su gente le ha enseñado a relajarse e intentar tomarse la vida de forma más pausada.

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