Roba las carteras a los feligreses y usa sus tarjetas: la justicia hace más que sentenciar una multaza
El hurto se clasifica como un delito contra la propiedad y puede ser castigado con penas de prisión o multas, dependiendo de la gravedad del delito y las circunstancias específicas.
Una profesora de la localidad rumana de Râmnicu Vâlcea ha sido condenada por varios robos a feligreses en varias iglesias a dejar su trabajo. Una medida que ha causado impacto por lo novedoso de la sanción, que no le hace devolver el dinero ni los fraudes digitales, sino que le prohíbe trabajar.
La profesora, madre de tres hijos y esposa de un sacerdote, fue condenada, en primera instancia, por la comisión de varios delitos, entre ellos el robo de bolsos de personas lesionadas y el acceso ilegal a sistemas informáticos bancarios. Tras cuatro robos, fue condenada a 2 años y 10 meses de prisión suspendida, tras la fusión de las penas impuestas por cada delito.
El tribunal también ordenó la prohibición del ejercicio de determinados derechos por un periodo de 2 años, así como la obligación de cumplir medidas de supervisión social por un periodo de 3 años. Una medida, el canjeo a dejar de trabajar en lugar de una pena de cárcel o una pena social,
La diferencia entre hurto y robo radica en el uso de la violencia o la intimidación. Mientras que en el delito de hurto se toma un bien ajeno sin emplear fuerza o miedo, en el robo se usa la violencia o la intimidación para obtener el bien. El hurto implica tomar un objeto sin la voluntad del dueño, con el objetivo de obtener beneficio económico, pero sin emplear fuerza en las cosas ni violencia o intimidación en las personas.
El robo implica la sustracción de un bien ajeno contra la voluntad del propietario. Puede realizarse de dos formas: mediante el uso de fuerza en las cosas, como forzar una cerradura para entrar en un lugar, o mediante violencia o intimidación en las personas, como puede ser amenazar a alguien para que entregue sus pertenencias.
En Rumania, el hurto está regulado por el Código Penal, específicamente en la Ley No. 286/2009. Según esta ley, el hurto se clasifica como un delito contra la propiedad y puede ser castigado con penas de prisión o multas, dependiendo de la gravedad del delito y las circunstancias específicas. El Código Penal rumano establece diferentes categorías de hurto, incluyendo el hurto simple y el hurto agravado. Las penas pueden variar desde multas hasta varios años de prisión, especialmente si el hurto implica violencia, se comete en grupo, o afecta bienes de alto valor. De ahí que este cambio en la sentencia haya llamado tanto la atención.
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