¿Me cubre el seguro si hay un apagón? Estos son los daños que puedes reclamar y los que no según tu póliza
Los daños en electrodomésticos, alimentos y servicios pueden ser compensados, pero todo depende de la póliza contratada y del origen del apagón.
El apagón eléctrico que paralizó buena parte del país desde las 12:30 del 28 de abril, y que se prolongó durante más de 10 horas en algunas regiones, ha dejado a su paso algo más que oscuridad. Electrodomésticos averiados, alimentos en mal estado y pérdidas económicas en empresas son solo algunas de las consecuencias más inmediatas.
Ante esta situación, muchos ciudadanos se preguntan si su seguro de hogar cubre los daños y cómo deben proceder para presentar una reclamación.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que, según la normativa vigente sobre calidad del suministro eléctrico, un apagón que no haya sido comunicado con al menos 24 horas de antelación y que dure más de tres minutos se considera no programado e imprevisible. Esto habilita al consumidor a reclamar, siempre que se cumplan ciertos requisitos.
Los daños más habituales tras un corte prolongado de energía eléctrica incluyen averías en electrodomésticos sensibles, como frigoríficos, televisores o sistemas de climatización; pérdida de alimentos que se han estropeado por la ruptura de la cadena de frío; e interrupción de servicios industriales y empresariales, en el caso de compañías con seguros de continuidad de actividad.
¿Qué dice tu póliza de hogar?
Una de las vías principales para reclamar es el seguro de hogar, pero no todas las pólizas incluyen cobertura por daños eléctricos. Los expertos recomiendan revisar las condiciones específicas del contrato y, si se dispone de dicha garantía, contactar de inmediato con la aseguradora para abrir un parte de daños.
Además, algunas pólizas también contemplan la compensación por pérdida de alimentos tras cortes prolongados. En este caso, la legislación establece que deben haber pasado al menos seis horas sin luz para poder presentar una reclamación formal.
¿Y si no tienes seguro?
En caso de no contar con un seguro de hogar que cubra este tipo de incidencias, la segunda opción es presentar una reclamación a la compañía distribuidora de electricidad, que por ley está obligada a garantizar la calidad del suministro, salvo en situaciones de fuerza mayor.
En determinadas circunstancias, si se demuestra que el origen del apagón fue un fenómeno atmosférico o una catástrofe natural, puede ser el Consorcio de Compensación de Seguros quien se encargue de evaluar y compensar los daños.
Para tener más posibilidades de éxito en la reclamación, es fundamental hacer fotos de los electrodomésticos dañados y de los alimentos en mal estado, guardar los tickets o facturas que acrediten el valor de los productos afectados, si es posible, pedir un informe técnico que relacione directamente el fallo del aparato con el apagón, presentar una reclamación por escrito detallando el incidente y los daños sufridos y conservar copias de toda la documentación enviada y recibida.
Si tras presentar la reclamación la respuesta no llega o la aseguradora la rechaza sin justificación clara, puedes acudir a organizaciones de defensa del consumidor como FACUA u OCU, que ofrecen modelos de reclamación y, en algunos casos, gestionan denuncias colectivas. También es posible escalar el caso ante la administración competente o el arbitraje de consumo.
Mientras las aseguradoras celebran reuniones de urgencia para evaluar el alcance de los daños, todavía no hay estimaciones oficiales sobre el coste económico de este gran apagón. Tampoco se ha confirmado si habrá acciones legales contra las compañías eléctricas, Red Eléctrica o el propio Estado, aunque no se descarta si se demuestra negligencia o fallo estructural.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opinión se publicará con nombres y apellidos