Hallazgo en Nuevo México: científicos encuentran evidencias de vehículos de hace miles de años

Hace 22.000 años de antigüedad, preservadas en sedimentos de grano fino, se han encontrado y documentado en el Parque Nacional White Sands, en el estado de Nuevo México, en EE. UU., evidencias de vehículos, se trata de rastros lineales y huellas humanas. Según la investigación, “la explicación más sencilla es que representan marcas de arrastre formadas por travois, consistentes en una sola vara o varas cruzadas, tiradas por humanos, presumiblemente durante el transporte de recursos. Por lo tanto, este registro único de huellas podría representar una de las primeras evidencias del uso de tecnología de transporte”.

Este transporte, sería algo parecido a una carretilla con ruedas. Estaría compuesto por dos postes de madera sostenidos con cada mano por delante y que se cruzaban por detrás en forma de V o X; también estaban formados por un travois que se arrastraba por el suelo para transportar carne, caza u otros suministros. Su uso es bien conocido por los científicos, pero este es, con mucho, el ejemplo más antiguo, precediendo a la invención del vehículo con ruedas en Mesopotamia en unos 17.000 años, según los investigadores. “No hay nada tan antiguo”, dijo el autor del estudio, Matthew Bennett, de la Universidad de Bournemouth.

Estas marcas han aparecido en el lodo seco de un antiguo lago en el Parque Nacional White Sands en Nuevo México, ocultos por sedimentos durante siglos, y ahora ‘exhumados’ por una mezcla absolutamente casual de erosión natural y excavación por parte de investigadores. Hasta ahora este tipo de huellas se habían encontrado con marcas de adultos, pero en esta ocasión parecen huellas más pequeñas, o infantiles o de mujeres. Y el rastro se alarga hasta 30 metros.

El Parque Nacional White Sands (WHSA) en Nuevo México comprende una de las mayores concentraciones de huellas de vertebrados cenozoicos en América del Norte. El área consta de dos componentes geomorfológicos principales: un campo de dunas de yeso del Pleistoceno terminal o Holoceno, y Alkali Flat, una playa en erosión que es el antiguo lecho del Paleolake Otero y sedimentos asociados del margen del lago.

Las huellas y los rastros de Proboscidea (mamut/mastodonte), Folivora (perezoso terrestre), Carnivora (cánidos y félidos) y Cetartiodactyla (bóvidos y camélidos) aparecen en Alkali Flat junto con restos humanos. Las huellas no solo se encuentran en grandes concentraciones, sino que se extienden por una amplia zona espacial, lo que permite seguirlas a lo largo de largas distancias. Las propiedades únicas del sitio lo hacen ideal para explorar las formas y comportamientos de vida pasada.

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