El rechazo del alquiler de un piso a una camarera: “Te aconsejo buscar un piso más pequeño”
La página de @soycamarero ha denunciado cómo el arrendador de un piso ha descartado alquilárselo a una camarera tras saber cuál es su profesión.
La hostelería y la vivienda, dos de los conceptos que más debate suscitan entre la población española. Por un lado, las condiciones de los camareros y demás trabajadores vinculados al mundo de la restauración: los salarios, el número de horas que pasan en su puesto al día, o el trato de los clientes son algunos de los puntos que entran en juego en dicho debate. En el caso de la vivienda el mayor problema que tiene es el de su precio. Los desbocados costos que supone poder asumir un alquiler en según qué ciudades es una de las mayores preocupaciones de los ciudadanos. Y, hay momentos, en los que ambos conceptos convergen.
Así le ocurre a una camarera procedente de Madrid que está buscando piso en la región de Portonovo, en Galicia, de cuya situación se ha hecho la página de Twitter @soycamarero. El usuario que se encuentra detrás de este perfil recibe a diario quejas de los trabajadores del sector hostelero y las comparte con el objetivo de ponerlas de manifiesto y denunciarlas. Por norma general, estas están vinculadas a las ofertas en las que exigen a los solicitantes firmar un contrato cuyas condiciones exigen hacer más horas que las que establece la normativa o no cumplen con lo que el texto recoge en cuanto a días festivos, vacaciones, bajas laborales, etc. Esta vez, habla de un caso de discriminación.
La camarera que busca piso se dirige al casero o casera que le va alquilar su nuevo hogar. Le expone quiénes van a vivir en la casa, que son ella y su hijo, sin mascotas, “ni visión de tenerlas”, añade. Asimismo, precisa que tiene un contrato indefinido. Y, finalmente, le detalla cuándo quiere entrar a vivir en el piso. A continuación, el arrendador le formula la siguiente pregunta: “¿A qué te dedicas?”. La camarera le precisa cuál es su profesión y en qué cafetería la ejerce. Entonces, el propietario de la casa deja de responder.
“Eso ya no te gustó”, le ha insistido la camarera. Entonces, el o la arrendatario/a le explica cuánto le va a costar el piso y cómo, con un sueldo como el suyo “no puede” asumirlo. “Son 700 euros más gasto”, comienza su explicación. “Con un sueldo de camarera no puedes pagar este piso”, asegura. “No es que no me guste, es que si un camarero gana 1.200 euros al mes, los que lo ganan, es inviable pagar 700 euros de piso y vivir”, añade. “Es un piso de 120 metros. Te aconsejo buscar un piso más pequeño”, concluye.
La captura de pantalla que han compartido en el perfil de @soycamarero viene acompañada del siguiente mensaje: “Otros problemas que nos solemos encontrar”. Y lo siguen multitud de comentarios protestando acerca del precio de la vivienda y del difícil acceso que hay a la misma, en consecuencia. Pero también hay varios usuarios que denuncian cómo el arrendador o arrendadora lo descarta, directamente, sin saber cuánto ingresa, sólo por su profesión.