Nairo no ha estado a la altura

Yo no sé si Nairo estaba realmente enfermo o no, no sé si tenía alergias o no y no sé si su bajo rendimiento se achaca a temas médicos o simplemente es que no se ha encontrado a sí mismo. No lo sé. Pero hay algo que tengo muy claro, y es que hay que saber hacer autocrítica. Aunque esas circunstancias sean reales o no, que, repito, ahí no entro. Ha terminado tercero y eso a pesar de esos problemas de los que ha hablado en más de una ocasión. ¿Y sus colegas que hayan quedado cuarto, quinto, sexto? Habría sido mucho más elegante adoptar la conducta que ha seguido Valverde. El murciano llegó y dijo: “Señores, no se puede atacar porque ellos van muy rápido y así es imposible. Lo hemos intentado pero no llegamos”. Chapó. Lo reconoces, lo has dado todo, pero no llegas, y no hay que avergonzarse porque delante tienes a quien tienes. Y ojo, que yo creo que Nairo tiene algún Tour en sus piernas.

Por otra parte, Froome ha vivido su Tour más cómodo. No ha pasado apuros en ningún momento, quizás porque en esta edición ha dado con el equipo más fuerte que jamás se haya encontrado. Hoy se corona en París. En definitiva, un Tour flojo con destellos positivos de los nuestros. Valverde estuvo extraordinario, más viniendo del Giro; Purito se cuela en el top-ten en su última gran vuelta, y Ion Izagirre presenta la candidatura de ciclista con mayúsculas. Y el Movistar, buen botín a pesar de todo. Podio de Nairo, triunfo de etapa en los Alpes y general por equipos. Lo que es el ciclismo...