Mañana comienza el Atlético a trabajar. Es cierto que la delantera tiene una pinta inmejorable con la continuidad de Griezmann y Correa y la llegada de Jackson y Vietto, pero los números no admiten dudas. Se han producido cuatro bajas (Arda, 35 millones, Mandzukic, 18, Miranda, 12 y Alderweireld, 12) que han dejado 80 millones en las arcas y solamente han llegado dos caras nuevas por un valor de 55 millones. Habilidad a la hora de mover los peones, pero hay un saldo positivo todavía de 25 millones y lo que pudiera ponerse por un buen balance económico que al parecer se va a reflejar en que al menos lleguen como mínimo otros tres jugadores antes del inicio la campaña. Se tiene que seguir subiendo el nivel de las exigencias y nada del discurso del tercer puesto. Es el momento de ir a por todas y confirmar que la intención es ser una seria alternativa para Real Madrid y Barcelona.

No me ha gustado como se ha producido la marcha de Turan y mucho menos su fichaje por el Barcelona, vía junta gestora y que con muchas dudas en función del resultado electoral. Parece que por el Atlético tienen claro su recambio. El que más gusta es Gaitán, pero hasta el momento el Benfica se ha cerrado a toda posibilidad pensando que desde la Premier pueden llegar ofertas superiores. Lo que pasa es que Jorge Mendes está metido por medio y no hay que descartar la posibilidad de que acabe al final como colchonero. Ahora gusta mucho el belga, con madre cordobesa del Mónaco, Ferreira Carrasco, que aparte de tener un futuro espléndido en lo deportivo su posible llegada sería un desembolso de 10 millones de euros. El que en las próximas horas estará en Madrid será Simeone y no tengo dudas de que va a pedir a sus directivos tener a todos los jugadores desde el principio, salvo los que llegarán más tarde por la Copa América. No quiere experimentos con gaseosa, ya que va a cambiar su disposición sobre el campo esta campaña y la primera prueba va a ser la presencia de Koke como auténtico líder en el pivote del centro del campo y por lo tanto hay muchas cosas que tienen que ser ensayadas durante la pretemporada.

Lo que si espero que no haya experimentos ni con Óliver Torres ni con Correa. Muchas peticiones para su cesión, pero los dos han demostrado que tienen calidad y virtudes para convertirse en las revelaciones colchoneras. Es igual que la llegada del argentino Kranevitter que me aseguran va a ser un auténtico jugadorazo. Es el momento de acelerar las gestiones, comunicar los fichajes y seguir con la política de luz y taquígrafos que siempre ha existido en los últimos años por el Calderón. No quiero oír más lloriqueos y en el propio vestuario tienen claro que esta temporada van a ir a por la Champions y la Liga y que el resto son complementos.