La UEFA se apunta a lo grande a la campaña #JusticiaParaTopo

El efecto contrario. Cuando alguien se plantea una campaña viral por todos los medios, lo que se espera es un apoyo y un seguimiento que aumente el eco del mensaje de manera progresiva. Lo que nunca nadie puede llegar a plantearse es que una institución trate de coartar la campaña y con su veto haga que esta sea mucho más efectiva. Por tanto, no nos queda más que felicitar a la UEFA por abrir expediente al entrenador del Bayern que el lunes lució en la rueda de prensa previa al partido ante el Oporto una camiseta negra bien pintona en la que podía leerse el mensaje #JusticiaParaTopo.

Motivos. Argumenta el máximo organismo del fútbol europeo que la acción del entrenador del conjunto alemán viola el artículo 11.2 apartado C del reglamento de la Champions según el cual “no se puede utilizar un acto deportivo para manifestaciones de naturaleza no deportiva”. Le han abierto expediente y el próximo día 21, cuando se reúna la Comisión de Disciplina, lo más probable es que le impongan una sanción económica.

La duda. Seguramente, la suerte está echada y si estos señores consideran “un acto deportivo” una rueda de prensa” y no lo que pasa después de ella, que fue cuando asesinaron a Jorge López en Brasil, pues no parece que haya mucho que hacer. No se esperan sorpresas.

Se la volverá a poner. Lo que ya pueden hacer los señores de la UEFA es ir guardando espacio en el Expediente Guardiola, porque antes de que se reúnan el 21 de mayo, se habrán jugado las semifinales de la competición el 5-6 y el 12-13 del mes que viene, y ya pueden dar por seguro que el señor entrenador del Bayern volverá a comparecer ante la Prensa con la camiseta puesta.

Agradecimiento. Así, que no queda otra que agradecerle al señor Platini el apoyo impagable que ha dado a la campaña. Sin poner un tuit, sin hacerse un selfie, sin hacer nada. Básicamente, su mérito es molestar. Y eso, lo bordan.

Protesta textil. Es tal el grado de carpetovetonismo de la UEFA, que están más atentos a la protesta textil que a la protesta por las Redes Sociales. Son como los obispos del franquismo que excomulgaban a los alcaldes que permitían bikinis en sus playas. Y mira el éxito que tuvieron. Gracias Michel.