La oportunidad de seguir la Fórmula 1 en un formato de pago por visión como es Movistar TV nos permite acceder desde nuestras casas a eventos hasta ahora reservados exclusivamente a los periodistas desplazados a los grandes premios. Y para cualquier buen aficionado supone una información de enorme valor, como las comparecencias de los pilotos ante la Prensa, las oficiales organizadas por la FIA o las particulares ante las cámaras de las televisiones. Y ha sido así como me ha vuelto a gustar mucho escuchar a Fernando Alonso en Bahrain; como ya nos ha contado Manuel Franco en varias ocasiones, parece muy tranquilo, convencido de su apuesta por McLaren pero ante todo exhibiendo la madurez propia de un gran profesional que, a los 33 años, lleva ya tres lustros en la élite.

Considero ésta una cualidad que le puede ser de enorme utilidad ante el tremendo desafío en el que se embarcado, porque hay tanto que hacer en Woking que cualquier otro podría verse superado por los acontecimientos o la presión. No así Alonso. El asturiano tiene las ideas muy claras, acepta la situación y está dispuesto a hacerle frente aportando toda su experiencia, que no es poca. Personalmente me anima que sea así, quiero pensar que esa madurez debe tener su recompensa, que tanto saber hacer no puede caer en saco roto. En cuanto el McLaren Honda alcance el nivel mínimo que nos han prometido, confío en que ese piloto consolidado y solvente saque a relucir todo aquello de lo que es capaz. Lo decía en Ferrari y lo repito ahora en este nuevo destino: si el equipo cumple, tengamos claro que su piloto no va a defraudar.