La Europa de los viejos conocidos

El sorteo inicial de la Champions es una de esas rutinas que se esperan con emoción para que luego vuelva a pasar lo mismo de siempre. La grandeza de la máxima competición debe ser esa. Emociona a pesar de que lo que acontezca sea un soberano tostón. A fuerza de ser sincero les diré que la gala es adocenada y carrinclona, los presentadores atildados, los espectadores unos siesos, las estrellas invitadas tienen menos gracia que un vigilante de aparcamiento y los resultados del sorteo nunca son sorpresa. Pero año tras año, a finales de agosto estamos pendientes de esas bolitas que siempre remueve alguien relacionado con el Real Madrid. Información, no opinión.

Y el resultado del primer sorteo no falla jamás. Es como una reunión de ex alumnos. Siempre hay alguien que hace tiempo que no ves. Algunos, como con el Paris Saint Germain hay negocios y cuentas compartidas. El jefe es el mismo. Por tanto, trataran de no hacerse mucho daño. Con el Ajax el Barça tiene una relación de referencias que empieza en Johan Cruyff (el origen de todo, opinión, no información), y que sigue con innumerables nombres, como Frank de Boer. Y nos queda el APOEL de Nicosia, donde milita Urko Pardo, excelente portero que se formó en la cantera culé y que ahora defiende al APOEL, rival del Larnaca donde está Xavi Roca. Europa y los viejos conocidos.