Márquez se marcará sus propios límites
Como no soy nada aficionado al juego no me atrevería a hablar de algo inédito, pero creo que sí que al menos es muy poco habitual que las casas de apuestas retiren a un deportista de sus cotizaciones por su indiscutible condición de favorito. Es justo lo que ha ocurrido con Marc Márquez. Las empresas dedicadas a esta actividad en Internet consideran que las opciones del catalán de renovar su corona de MotoGP son tan altas que no ofrecen mejoras en la inversión a los apostantes. Así que las matemáticas refrendan lo que ya indica la lógica: el líder del Mundial será quien ponga los límites con su atrevimiento y ambición, porque en condiciones normales nadie parece capacitado para inquietarle seriamente en su privilegiada posición.
La temporada está justo en su ecuador, Márquez ha ganado las nueve carreras disputadas y quedan otras tantas por delante. Su ventaja de 77 puntos respecto a Pedrosa, el segundo clasificado, se traduce en tres grandes premios de margen, un tercio de los que restan. Es decir, sólo una catástrofe puede apartar al ilerdense de su objetivo. Sin caídas o lesiones, y al margen de ese desafío de ganar todas las pruebas del año, Marc puede afrontar con muchísima tranquilidad lo que se avecina… aunque no lo hará. Ese matiz es la clave del asunto, hasta dónde será capaz de jugársela para continuar batiendo récords, sumando triunfos y apuntalando su liderato. Si Pedrosa, Rossi y Lorenzo consiguen apretarle en esta segunda mitad, Márquez tendrá que plantearse qué cartas pone sobre el tapete. Parece más que previsible que no será conformista, no es ése su carácter, así que en esos riesgos reside la única incertidumbre, aunque tan insignificante que ni las casas de apuestas la contemplan.
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