Qué manía con querer hacer de los jugadores líderes éticos y morales de esta sociedad. En Inglaterra muchos han celebrado la marcha de Luis porque no representa los valores en los que toda sociedad bienpensante debería fundamentarse. Eso o que les ha dado mucha rabia perder al mejor delantero centro del mundo. Porque es lo que ha pasado de nuevo con la Premier League. La competición más rica del mundo se ha quedado, por segundo año consecutivo, sin su máxima estrella y han querido disimular el golpe con titulares en contra de la categoría moral del jugador. Me parece que les estamos pidiendo demasiado a los jugadores si queremos que se comporten excesivamente bien. Está claro que Luis Suárez tiene un problema y que el Barcelona va a hacer todo lo posible para corregirlo.

Mi duda no es tanto si encajará en un equipo en el que Messi dé quizas un paso atrás, sino cómo encajará Luis Enrique, fanático del juego posicional, a tres futbolitas que disfrutan con total libertad en el campo. Otra duda es que, si se intenta corregir sus excesos, ¿será el mismo jugador? En todo caso, el Barça tendrá una delantera formidable y será fascinante ver cómo se equilibra todo en el terreno de juego.