Demba Ba. Gol decisivo, como ante el PSG, en pleno atasco del Chelsea. En una de las pocas jugadas en que se desarmó el Swansea, lo que permitió el pase de Matic. De tercer delantero a jugador importante. Quizá salga si llega Diego Costa.

Gerrard. Conmovedor su partido como holding midfielder, medio de contención puro, con menos llegada. Otra demostración de la inteligencia de un superdotado, que irá al Mundial como titular. Decisivo cuando más le necesitaba, reunió al equipo para exigirle concentración ante lo que queda.

Liverpool. Ni Sterling ni Flanagan ni Coutinho ni Henderson, por ejemplo, habían nacido cuando el Liverpool ganó su última liga en 1990. En medio, una Champions y otra final. Por eso comentaba Aldridge al inicio del partido que era el más importante jugado en liga en 25 años. No se equivocaba.

Reus. El Dortmund presionó muy arriba al Bayern y le complicó. Sin Lewandowski pero con Reus perfecto de falso nueve, con movilidad y ayudas permanentes. Con y sin balón, Reus dio un recital. Cada vez más completo, el futuro es suyo. Con o sin Klopp, el Dortmund debe edificarse sobre su figura.

Bayern. No es nuevo y contra el Dortmund repitió: con el balón, renuncia al lateral derecho. Defensa de tres, Javi Martínez cerca de la banda y Rafinha al medio junto a Lahm. El sábado perdió, pero no dio un pelotazo.

Higuaín. Marcó su primer hat-trick en Italia en un buen partido. Movilidad permanente en un Nápoles que además tuvo un gran Mertens y ganó a un Lazio competitivo, con un buen Candreva y sin intenciones conservadoras. Con la Champions segura, el Nápoles necesita un título.

Kewell. Se despidió del fútbol en su Melbourne Heart y recibió el merecido homenaje. Uno de los mejores australianos de siempre, para muchos el mejor. Zurda imparable y velocidad, integrante de uno de los mejores Leeds, en Liverpool se convirtió en el único australiano campeón de Europa.

Colo Colo. Un gol de Flores ante Wanderers dio el título 30 a Colo Colo en Chile. Volvió Paredes como goleador, Valdez en el medio y se aprovechó del mal momento de la U de Chile, a quien ganó en la jornada anterior. Muy superior al resto, dejó partidos inolvidables.

Benfica. Su juvenil aplastó al Madrid en la Champions y los mayores asoman hacia otra liga y una posible final europea. Fantásticos los juveniles, con Nuno Santos en la izquierda, el manejo del mediocentro Rochinha y la potencia y movilidad de Pereira. Veremos cuántos llegan arriba, pero prometen.

Rangers. Se le descendió a cuarta y arrasa en tercera, pero de vez en cuando demuestra su grandeza. Llenó Ibrox Park de gente y orgullo para la semifinal de Copa ante el Dundee. Vimos a su mundialista, el hondureño Peralta, y a Ally McCoist como técnico. Perdió, pero la grandeza está siempre.