Estas leyendo

Carta abierta a Javier Fernández

HOMENAJE

Carta abierta a Javier Fernández

Carta abierta a Javier Fernández

Maddie Meyer

AFP

Le dedicamos unas líneas al patinador por su última gran gesta en Boston

Estimado Javier Fernández,

En primer lugar y vaya por delante, enhorabuena. Eres campeón del mundo y eso no es fácil. No lo es de por sí, pero menos para alguien que triunfa en un deporte completamente minoritario en España. Para un chico que ha tenido que aguantar todo tipo de bromas y ha tenido que dejar su hogar para ver cumplido su sueño.

No debe ser fácil salir a derretir el hielo bajo los focos. Surcar un mar de dificultades cuando todo está en tu contra. Marcar el paso sobre tus cuchillas sin saber a dónde te llevará el próximo salto. Aterrizar y recibir esa ovación sorda cuando un día lo viste imposible.

Eres muy grande Javier. Muchos te admiramos y sentimos algo de envidia. Pero tranquilo, que es de la sana. Decía Confucio (no el chino-japonés inventor de la confusión, el otro): "Elige un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar ni un día de tu vida".

 

Así es. Te das cuenta que es más que la típica frase que alguno que otro se pone en el muro de Facebook cuando ves a alguien como tú haciendo lo que más le gusta. Tú no saltas 'Súper Javi', vuelas. Tampoco patinas, flotas. Nos sumes en una especie de hinopsis que solo concluye con el final de tu programa.

Ejecutas con precisión de cirujano cada uno de tus movimientos, capaz de repetir mundial metiéndote al público de Boston en el bolsillo con la mejor actuación de tu vida y con Sinatra de banda sonora. Ese venerable que tantas veces hemos visto en el Garden, que no te lo regala nada, pero se rinden ante la gloria. ¿Recuerdas cómo te ovacionaron en pie?

 

Se rindieron a tus encantos Javier porque nunca te rindes. A pesar de tus molestias y de la presión de tener que revalidar tu mundial. Ya se sabe, la gente se acostumbra pronto a la miel, supiste dejar todo fuera del hielo y brillar como si fuese la última vez. Siempre esa sonrisa, esa humildad, ese agradecimiento profundo a tus fans.

La conclusión es que te debemos mucho y campeones como tú nos regaláis tanto... Sirva esta carta como reconocimiento a tantas caídas en el hielo, noches echando de menos a tu familia en Canadá y sobretodo, por las veces que dijisté "Sí, puedo" cuando el mundo te decía que desistieras. Gracias por esto, Javier. Nunca lo olvidaremos.

0 Comentarios

Para poder comentar debes estar Registrado y haber iniciado sesión. ¿Olvidaste la contraseña?

También te puede interesar