El 89 por ciento de las personas que padece dermatitis atópica asegura sentirse impotente ante su enfermedad, que va mucho más allá del picor de la piel, ya que causa, además, tristeza e irritabilidad.

Con motivo de la celebración mañana del Día de la Dermatitis Atópica, la asociación de familiares y pacientes de esta enfermedad (ADEA) ha presentado un estudio llevado a cabo por 30 dermatólogos de diferentes comunidades autónomas a partir del testimonio de 125 menores y 116 adultos.

La dermatitis atópica es una enfermedad que se caracteriza por la sequedad de la piel, la aparición de lesiones de enrojecimiento e inflamación, así como la descamación en placas junto con un "intenso" dolor, según afirma la ADEA en un comunicado.

El picor provoca el rascado del paciente iniciando así un "círculo vicioso" que provoca más irritación de la piel, haciendo más graves las heridas y "corriendo el riesgo de una sofreinfección".

La consecuencia de todo ello es que el 89 por ciento de los pacientes se siente "impotente" ante su enfermedad, el 78,4 por ciento irritable por los síntomas y el 70 por ciento cansado y triste "ante el impacto en su vida".

El 81 por ciento asegura estar preocupado por su aspecto físico al tener una piel "imperfecta" y, además, al 80 por ciento le limita el ocio, al 60 por ciento las actividades sociales y al 37 por ciento le hace sentir "incómodo" en el trabajo o en el colegio.

El impacto también es "muy importante" en los menores, de hecho es la patología crónica de la piel más frecuente en niños, quienes suelen tener una media de cinco brotes al año, con una duración de 18 días cada uno.

Estos brotes les provocan problemas para dormir y como consecuencia, cansancio y cambios de humor.

Las recomendaciones de los médicos para que los pacientes tengan "controlada" la enfermedad empiezan por hidratar la piel y usar cremas hidratantes y emolientes, ya que la atópica es una "piel desprotegida".

Además, es necesaria la aplicación correcta del tratamiento farmacológico tópico para cuando aparece el brote y también de mantenimiento para la inflamación de la piel, así como el empleo de agentes limpiadores o jabones adecuados y seguir las recomendaciones en la alimentación.