Dukan, Detox, Atkins, Ornish, Flash… Estas son solo algunas de las dietas milagro más famosas de la actualidad. Quien más o quien menos ha oído hablar de ellas sino las conoce en profundidad o las ha probado. Soluciones exprés que prometen bajar rápido de peso y que en estas fechas preveraniegas vuelve a ponerse más de moda todavía. Son dietas disociativas, hipocalóricas o excluyentes -ya sean ricas en proteínas, en grasas o hidratos- que en un principio dispararon las alarmas de todos los especialistas por sus posibles efectos secundarios pero que, a pesar de ello, se han instalado totalmente en la sociedad. Tanto que un reciente estudio presentado por la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) asegura que uno de cada tres españoles con problemas de obesidad ha recurrido a estas dietas milagro para adelgazar.
Aun así, alertan de que “son un riesgo para la salud y se pueden volver en contra del paciente por el efecto rebote y posibles complicaciones en la comorbilidades que el presente el paciente con obesidad”, tal y como aseguró en dicha presentación la doctora Ana Zugasti, médico adjunto de la sección de Nutrición y Dietética Clínica del Complejo Hospitalario de Navarra.
Básicamente estas dietas exprés, o llamadas por los expertos heterodoxas, se basan en la prohibición de algún grupo de alimentos. Por ejemplo la Dukan es hiperproteica, la Montignac disociada y la Atkins pobre en carbohidratos. Y triunfan por su rapidez y porque prometen alcanzar ese peso ideal y mantenerlo. “Algo completamente erróneo porque cuando los pacientes terminan de hacer este tipo de dietas recuperan todo el peso perdido”, afirma Zugasti.
Sin embargo y frente a estos argumentos, el Consejo Internacional de Información Alimentario publicó el pasado mes en el Journal of Nutrition Education and Behavior un estudio que señala que el 37% de las personas que optaron por una dieta proteica y aumentaron la ingesta de proteínas durante dos años logró adelgazar y mantener su peso. Este informe, elaborado por investigadores de la Universidad de Minnesota, afirma que las dietas proteínicas son eficientes para mantener el peso ideal.