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balonmano\Europeo femenino

Las Guerreras le regalan a las suecas una victoria amplia

25-19. Mal debut de España en el Campeonato, que perdió tantos balones como goles marcó frente al anfitrión, tercero del último Europeo

Actualizado a
Alexandrina Cabral, en uno de sus goles.
Fredrik SandbergEFE

España - Serbia en directo

Mal día para practicar el regalo, porque 19 pérdidas de balón es un exceso aunque se quiera se amable con el equipo anfitrión con el que se debuta en el Europeo. Por eso perdió España, o ganó Suecia, que tanto da: 25-19 (14-10). Un resultado que, aunque sea el primer partido, debe escocer a las Guerreras. Ellas saben que así no se va a ninguna parte, por más que el juego español, su velocidad, tenga ese problema, que se pueden perder balones. Pero 19 (9 y 10) es un exceso impropio de esta Selección que tiene talento y calidad.

Además, Suecia no es una selección de montón, es la tercera del Europeo en la que España ganó la plata (2014), juega en casa, está preparada para hacer algo importante, y los intangibles están a su favor. Es decir, ganar este encuentro necesitaba velocidad y paciencia en ataque, y concentración en defensa. Desde fuera, claro, da la sensación de que faltó todo: España no sumó ni un gol de contragolpe; intentó tres, uno lo falló, y en dos perdió el balón. Un aspecto que ayuda poco.

En realidad, de España sólo estuvo a su nivel Silvia Navarro. La portera del Rocasa, no se sabe cómo, siempre se agranda en la portería española. El resto, por debajo de lo que se las puede exigir, porque Macarena Aguilar, Nerea Pena, Alexandrina Barbosa...no llegaron a su nivel; Marta Mangué tiene justificación, porque juega con problemas físicos, y las extremos, porque no recibieron balones. Y así, sin estirar la pista, y buscando golpes en penetraciones por el centro, se estrelló España ante un rival que sólo perdió siete balones y que sí metió goles de contragolpe.