El Mapfre mantiene el segundo puesto en una regata reñida

El Mapfre se encuentra en la segunda posición de la reñida quinta etapa de la Volvo Ocean Race, la vuelta al mundo a vela con escalas, después de otra jornada repleta de trasluchadas y el cambio de liderato en beneficio ahora del Alvimedica. Continúan en su camino hacia el Cabo de Hornos, uno de los puntos claves del recorrido entre Auckland (Nueva Zelanda) e Itajaí (Brasil), y después de haber recorrido más de 3.000 millas todo se reduce de momento a una especie de costera donde únicamente el SCA se volvió a descolgar.

"Nunca he vivido una vuelta al mundo así de reñida", explicaba Andrew Cape, navegante del Team Brunel y uno de los veteranos de la regata. Y es que los límites de la puerta de hielo siguen siendo los protagonistas de una flota donde los cinco primeros están situados en apenas once millas y en continuo contacto visual, después de que se vieran obligados a bordear esta zona de exclusión de hielo establecida por la organización para evitar el peligro que representa un iceberg de 1 kilómetro de longitud a la deriva a algo más de 200 kilómetros al sur.

El viento también volvió a subir y el Mapfre no lo desaprovechó para volver a tomar la delantera durante unas horas, pero la tremenda igualdad provocó que este liderazgo no durase demasiado y fuese a parar horas después al Alvimedica que, según el parte de posiciones de las 16.40 hora peninsular española, aventaja en 2,5 millas a los de Iker Martínez.

Algo más alejados, pero pegados a los dos barcos de cabeza se situaban el Brunel, el Dongfeng y el Abu Dhabi, mientras que el SCA, después de haber remontado mucha desventaja, se volvía a descolgar a unas 80 millas, con las chicas reparando todavía las velas que resultaron dañadas el pasado martes cuando volcaron en el Océano Sur.

Según informan desde el Mapfre, en 48 horas parece que vendrá aún un viento más fuerte, alcanzando posiblemente su máximo en Cabo de Hornos, que parece que en esta edición va a hacer gala de su fama.

"Prepararos para lo que va a ser un final de regata duro cuando el viento comience a aumentar y no deje de hacerlo", advertía durante el cambio de guardia Iker Martínez a Ñeti Curvas-Mons y a los dos más jovenes de la tripulación, que doblarán Hornos por primera vez, Willy Altadill y Fran Vignale. "Después de Hornos nos esperan otros 40 nudos de ceñida para después encontrarnos con otros 35-40 nudos del Oeste", añadía.