"La inmigración es para España fuente de riqueza"

Polideportivo | Foro Ferrándiz

"La inmigración es para España fuente de riqueza"

"La inmigración es para España fuente de riqueza"

macario muñoz

El Foro Fundación Ferrándiz-AS trató ayer sobre 'El deporte como factor de integración social'. Para debatir la cuestión, Joan Lino, medalla de bronce en Atenas, y dos deportistas amateur e 'integradores' profesionales, uno marroquí y otro rumano. Los tres dieron ejemplo

Su hija, pelirroja pizpireta, se había enamorado de un médico negro. Después de liberarse de sus prejuicios como quien se suelta una mochila llena de piedras, Spencer Tracy dio su bendición a la pareja y resumió el asunto como un "insignificante problema de pigmentación". La cita pertenece a la película Adivina quién viene a cenar esta noche (1967), un ensayo de Hollywood contra el racismo que no pierde actualidad, miren alrededor. Y viene a cuento porque ayer el Foro Ferrándiz-AS trató sobre El deporte como factor de integración social, no se asusten por el título. Los ponentes: un cubano-español, un marroquí y un rumano. Tres campeones, cada uno en lo suyo. Al primero lo conocen, Joan Lino, medalla de bronce en salto de longitud en los Juegos de Atenas; a los otros dos es probable que nos los conozcan, aunque han visto gente parecida; se los presento.

Nicolai Mircha procede de Transilvania ("aunque no muerdo", bromea) y llegó a España en 1991, con 19 años. A Nicolai, media melena flamenca, se le confunde el acento de los Cárpatos con un deje de Chamberí, aunque él vive en Alcalá de Henares, como otros 20.000 rumanos. Allí ha creado un equipo de fútbol formado por compatriotas que milita en Segunda Regional, el único de inmigrantes federados. Su nombre es Alba-Henares, en homenaje del pueblo que les vio nacer y de la ciudad que los acoge. "Cuando llegué a España no había más de diez rumanos en Alcalá. Teníamos que poner a nuestras mujeres de porteras para poder jugar. Ahora todo ha cambiado. Nos cuesta mucho dinero (alquiler de campos, árbitros, fichas), pero merece la pena".

Nicolai lleva el fútbol en la sangre. Sangre blanca, para más señas. Con 12 años subió con su padre una montaña de 2.000 metros para desde allí orientar la antena de su televisor hacia una emisora serbia que transmitía el PSV-Real Madrid, semifinales de Copa de Europa. "¡Qué pena aquella tijera de Hugo!", recuerda.

Cuando Paco Buyo, su ídolo, le entregó un trofeo en el Mundialito de la Integración que organiza AS desde hace dos años, Nicolai, guardameta trotamundos, rompió a llorar. "La gente debía pensar que me había vuelto loco, ¡si yo no había llorado ni en mi boda!".

Taib Hiaiti es marroquí y trabaja como camarero. También es presidente del Asociación Atlético de Marruecos. Desde hace nueve años dedica sus ratos libres a organizar equipos de fútbol que participan en Juegos Municipales y en todo torneo que se presente, desde el citado Mundialito de la Integración al campeonato que se ha celebrado recientemente en Marruecos y que ha enfrentado a selecciones de inmigrantes marroquís en todo el mundo. Las camisetas del equipo español las ha patrocinado Madrid 2012.

"Dentro de un tiempo veremos a rumanos y marroquís en la Selección española, del mismo modo que en la selección francesa ha jugado un argelino como Zidane y lo hacen otros muchos hijos de inmigrantes. No sé cuánto tiempo será necesario para ver eso aquí pero cuando ocurra estoy seguro de que España ganará por fin la Copa del Mundo...", sentencia Taib.

Entre tanta elocuencia, Joan Lino tiene que hacerse sitio. Y lo logra. "La inmigración es para España la riqueza del siglo XXI, no hay más que ver el ejemplo de Estados Unidos. No somos una amenaza, sino gente que venimos a mejorar nuestra vida y a trabajar. No hay que asociar inmigración con delito".

Lino: "En el tren nadie se quería sentar conmigo"

Durante el debate se habla mucho de puertas, de las que se abren y de las que se cierran. "El deporte me ha permitido abrir muchas puertas que de otro modo hubieran estado cerradas, para mí es la puerta a la que puedes llamar siempre", afirma Nicolai Mircha. Alfredo Relaño explica que "el deporte es la mejor puerta de entrada para los inmigrantes y sus hijos. En el deporte las reglas son iguales para todos". "En la cancha no hay exclusión posible", añade Pedro Ferrándiz.

Pero aunque hay coincidencia en las mejoras, no todo es bonito, ni de color de rosa, en absoluto. Joan Lino lo confirma: "Hubo una época en la que, para entrenarme, tomaba todas las mañanas el tren de Guadalajara a Madrid. En todos esos viajes pude comprobar que, aunque el vagón acababa repleto de gente, el último asiento en llenarse era siempre en el que yo iba sentado. Algunos preferían ir de pie antes de ocuparlo. Y yo no olía mal, me aseaba cada mañana, simplemente era por mi color". Lino habla con una sonrisa, pero también con indudable amargura.

"Nadie admite que es racista e incluso mis compañeros se sorprendían cuando les contaba cosas así, pero les puedo asegurar que si yo me cruzo a las doce de la noche con una señora es muy probable que ella agarre bien su bolso y mire un par de veces hacia atrás hasta que yo me haya alejado".

"No querer relacionarse es una muestra de incultura. La gente debe ser consciente de que no se emigra por gusto, se dejan muchas cosas atrás, no venimos a deshacer nada", razona el saltador.

Nicolai admite que en algunos partidos, especialmente cuando el rival pierde, no es raro que algún adversario les increpe por ser rumanos ("¡iros a vuestro país!", "¡hablad en cristiano!"). "Sin embargo, siempre que eso sucede hay una mayoría de compañeros de quien insulta que le recriminan por haberlo hecho".

El optimismo de Nicolai, su ánimo, es arrebatador. "España nos ha acogido a todos y el inmigrante debe querer integrarse, tiene que aprovechar la oportunidad que se le está dando, debe darse cuenta de eso. Mis dos hijos no podrían jugar al fútbol en Rumanía porque no hay campos. Los que venimos de fuera sabemos lo que hay aquí y los propios españoles deberían valorar lo mucho que tienen".

"Yo les pregunto a mis compatriotas, ¿cómo os sentiriais vosotros si de repente llegaran a vuestro pueblo un montón de españoles? ¿cómo los acogeriais? No es fácil, se necesita tiempo, ha ocurrido todo de golpe, para todos es nuevo, para nosotros también. Mis hijos me contestan en español cuando les hablo en rumano y la niña se llevó una decepción enorme porque Rumanía quedó por delante de España en el pasado Festival de Eurovisión".

Taib recalca que del mismo modo que no se puede generalizar en la condena a los inmigrantes tampoco se puede hacer para calificar de racistas a los españoles. "La integración depende de nosotros mismos y de la gente que tiene el poder. Pero yo también creo que sólo es una cuestión de tiempo. No podemos sentirnos inmigrantes por dentro y no cualquier roce social se puede considerar racismo".

Educación.

Javier Martín del Burgo, viceconsejero de deportes de la Comunidad de Castilla-La Mancha, considera que la integración hay que trabajarla tanto en la familia como en la educación. Y cita a Platón: "Pon en la escuela lo que quieras en la sociedad".

Castilla-La Mancha, junto a la Comunidad de Madrid y Andalucía está siendo de las comunidades más beligerantes en favor de la integración. Y no es sencillo. Hay reglamentos, como ocurre en el caso del fútbol, que no permiten la participación de inmigrantes si no es acreditando diez años de residencia, pertenencia a un club y contrato de trabajo. Requisitos más obsoletos que leoninos, alejados de la problemática social y nocivos para la integración.

"No puedo entender que se pongan trabas a la práctica deportiva. El deporte se debería poder hacer por mandato de Dios. La negativa de las instituciones a quien quiere hacer deporte es una de las mayores barbaridades que se me ocurren. Se me parte el corazón cuando me cuentan que un chico de 12 años no puede competir. Yo mismo conozco un cadete que es de los mejores y no puede hacerlo porque, pese a vivir en España hace ocho años, aún no posee la nacionalidad".

Sagrario Aguado, ex saltadora de altura y experta del Consejo Superior de Deportes (aunque se quite importancia) incide en los problemas burócraticos. "Trabajamos con chavales que tienen un gran potencial y a la hora de la verdad no podemos contar con ellos para las competiciones porque aún no han obtenido la nacionalidad. Para lograrla hay que mover muchos papeles y tocar muchas puertas. Y chicos que hemos formado corren el riesgo de irse o de quedarse en el camino".

Etoo.

"Me hizo gracia cuando Etoo dijo al fichar por el Barcelona que trabajaría como un negro para vivir como un blanco. Pero luego lo pensé y vi que estaba equivocado. Lo que debería hacer Etoo es trabajar como un negro para vivir como un negro, que es lo que es. No hay mayor bajeza que juzgar por el color de la piel", reflexiona Lino.

Taib también se refiere a Etoo. "Lo que dijo del Madrid durante la celebración del título echa por tierra mil años de nuestro trabajo por la integración. ¿Qué ocurrirá cuando venga Etoo al Bernabéu? Pues que habrá gente que no le perdone por sus declaraciones y es posible que entonces surjan comentarios racistas. Creo que no es suficiente que luego pidiera perdón en público, debería habérselo pensado más antes de hablar".

Entre las intervenciones más destacadas, la de un muchacho del colegio de Nuestra Señora de la Consolación: "He sido alumno durante cuatro años de un colegio de barrio, lleno de inmigrantes. He sido educado en que todos somos iguales y estoy de acuerdo en que la educación es lo primero y estoy agradecido por la que me han dado mis padres. No veo que nadie llame sudaca a Forlán o descalifique a Etoo por ser negro...".

Y responde Lino: "Porque valoramos a las personas según el capital que tienen". Ya se sabe, el moro con dinero es un jeque.

"La desconfianza se vence con educación". "El deporte separa del mundo malo, pero antes de llegar a ser zidanes tenemos que poder ser personas normales". Muchas grandes frases. Y un gran Foro. La primera batalla se gana acercándose. La segunda, hablando.