Martín Mantovani: “También en Primera jugaremos de tú a tú”
El capitán del Leganés mira con optimismo el debut del equipo en Primera, pero advierte de que podría haber momentos duros.
Martín Mantovani acaba de soplar 32 velas en su tarta de cumpleaños. Veterano por experiencia, afronta su debut en Primera con la ilusión de un muchacho que no le teme a nada, ni a nadie. Una filosofía que se funde con la del equipo del que es capitán, un Leganés que, insiste este amante de los ‘quilombos’, no está entre los grandes de pasada.
—El reto de debutar en Primera se acerca… ¿da miedo?
—¿Miedo? No. Tenemos respeto. Pero sobre ese respeto también hay que tratar de jugar de tú a tú con quien sea. Hay que dejar de lado el hecho de que juegas contra nombres importantes. Si llegamos hasta aquí es porque nos lo ganamos, nos lo merecemos. Algo tendremos para poder competir contra ellos.
—¿El Leganés está en Primera de pasada?
—No. Se han vivido muchos cambios. Venimos de estar en Segunda B hace tres años. Nadie nos esperaba aquí, pero la idea debe de ser la de mantener la categoría y pasar muchos años.
—Como por ejemplo hizo el Getafe…
—Ojalá. Es algo primordial para el club y para todos. Mantenerse te da la vida. Además de revalidar lo que hemos hecho. Resistir, por ejemplo, como el Eibar, confirmaría que ese trabajo se ha hecho bien. Descender rápido te hace pensar que lo conseguimos por casualidad. Y no es así.
—Leicester, Islandia, Leganés… ¿se ve la próxima temporada como el matagigantes del fútbol español?
—No lo he pensado. Pero podría pasar. Aquí cualquiera le puede ganar a cualquiera. Hay que ser positivos. Nuestro primer año en Segunda ya dimos campanadas contra Betis y Las Palmas. Eran los grandes y los tumbamos.
—Garitano dice no quiere escuchar en el vestuario la famosa frase “este equipo no es de nuestra Liga” cuando se enfrenten a un grande.
—Totalmente de acuerdo. El respeto debe existir siempre. Saber la importancia de los equipos y de los jugadores, porque nos vamos a enfrentar a los mejores jugadores del mundo. Pero a partir de ahí, teniendo ese respeto, hay que salir a disputar cada partido pensando que llegamos aquí porque nadie nos regaló nada, porque hemos disputado todos los partidos como animales. Hay que seguir esa dinámica. Disputar todo partido sea con el Barcelona, con el Real Madrid o con el Eibar y Granada.
—¿Es consciente de que con el salto de categoría, piezas clave como usted quizá deban asumir un rol secundario?
—Estamos preparados. Tenemos que contemplar todas las opciones. Estoy contento con el trabajo que he hecho. Pero estamos en una categoría que exige lo máximo. Si un jugador no da el nivel, debe ser consciente de que debe pasar a un segundo plano, pero siempre animando. Como capitán espero hacer entender a la gente de que todos debemos arrimar en la misma dirección.
—El aficionado del Leganés debutará en Primera tras ver a su equipo ganarlo todo y puede que pase a, quizá, observar como los suyos caen con frecuencia en Primera.
—Sí. Es así. Totalmente. Tenemos que pensar que ahora todos los partidos se nos van a complicar mucho. El año pasado ganamos muchísimos. La gente, quieras o no, se acostumbra a que el equipo esté bien, a que dé alegrías. Este año la gente tiene que pensar que estamos en una categoría muy complicada, que por ahí las alegrías no serán tantas.
—Habrá que tener paciencia también con el entrenador si llegan las derrotas.
—Viviremos algo histórico, pero en cualquier categoría, si pierdes tres partidos seguidos, las cabezas se giran hacia el banquillo. No sería la primera vez que a un entrenador, tras ascender, lo echan por perder algunos partidos. Ojalá empecemos bien, pero si no, deseo que el club tenga esa paciencia por mucho que la gente no la tenga. De ahí el mensaje de tranquilidad al público. Hay que tener los pies en la tierra.
—Con la renovación de Garitano, el Lega ha hecho un gran ‘fichaje’
—Sí. Es la persona que ha llevado a este club desde Segunda B a Primera. Se le debe respetar por haber conseguido esta gesta. Es una persona que respeta mucho al resto, que ha arraigado la cultura del esfuerzo y que, a su vez, pega mucho con las características del club: humilde, trabajador… es fiel a la filosofía del Lega.
—¿Da vértigo imaginar un Leganés sin Garitano?
—No sé si llamarlo vértigo, pero sería diferente. Tenerle en el club da tranquilidad. Traer otro entrenador es cambiar la filosofía. Este club se ha ganado el derecho de estar en la élite gracias a ese pensamiento. Mucho de eso se lo debemos a él.
—Garitano siempre ha sacado a todos sus jugadores más de lo que parecía que podían dar.
—Tiene una forma de entrenar constante… es muy pesado (Risas). Mantiene a todos los jugadores, a todos, expectantes porque pueden jugar. Eso hace mantener tu nivel al máximo. Puede contar con cualquiera que no esté jugando. A veces los que tienen menos minutos tienen una importancia imprevista. Sucedió con Rubén Peña. No era un jugador clave y acabó siendo vital en el ascenso.
—¿Le sorprendió que Rubén Peña se fuera al Eibar?
—Sí. No me lo esperaba, la verdad. Pero bueno… eso ya son decisiones de cada uno. Su temporada fue muy buena. Nos aportó mucho. Por algo habrá decidido irse. Ahí no me meto.
—¿Cuántas veces ha llamado a Insua este verano para que finalmente volviera al Leganés?
—Ninguna. Él sabe bien lo que pienso de él. Pero yo creo que las vacaciones siempre están para disfrutar. Por eso no lo llamé antes de que volviera.
—¿Qué fichajes debe hacer el Leganés para mantenerse en la categoría.
—Yo he vivido aquí una transformación importante, pero esto tres años, junto con Garitano, he aprendido su forma de trabajar. Siempre reúne a jugadores constantes, humildes, trabajadores. A partir de ahí, creo que vendrán jugadores en esa línea. No creo que vengan figuras que no acepten trabajar.
