NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ESPANYOL

Diez motivos para creer en la final del Espanyol ante el Sevilla

La fiabilidad de Cornellà, el retorno de Víctor Sánchez y Óscar Duarte, una afición que nunca falla, el cansancio europeo del rival y hasta Glasgow, entre las claves.

Actualizado a
El Espanyol quiere culminar su final ante el Sevilla con la alegría de la permanencia en Cornellà-El Prat.
RODOLFO MOLINADIARIO AS

El españolismo debe convencerse de que la permanencia pasa por sumar los tres puntos este domingo, ante el Sevilla. Por eso, AS arroja diez motivos que pueden empujar al equipo hacia una victoria definitiva para conseguir su objetivo. Claves que implican a jugadores, club y afición. Porque deben ir todos a una.

1. Cornellà-El Prat es el fortín sobre el que se sustenta la permanencia. 26 de los 37 puntos han llegado en casa y es ahí donde la plantilla se siente segura. Solo el Atlético, aspirante al título, ha ganado en feudo perico en las últimas jornadas. Cayeron Depor, Rayo, Athletic, y empató un Celta que va como un tiro. Es el momento de reafirmarlo.

2. El regreso de Víctor Sánchez y de Óscar Duarte, tras sanción y lesión respectivamente, supone para el equipo la vuelta de dos pilares fundamentales. Por la seguridad que aportan sobre el césped y por el liderazgo del que dotan al vestuario. No son dos jugadores más, son determinantes. Basta con ver los resultados del Espanyol con y sin Víctor Sánchez.

3. El Espanyol siempre funciona mejor bajo presión. Lo demostró tras el cambio en el banquillo (superó un bache derrotando en cuatro días a Levante en Copa y Las Palmas en Liga) y también cuando el descenso se acercó como nunca, tras caer ante Real Sociedad y Valencia: entonces encadenó 13 de 18 puntos. El relajo no les conviene, y ahora desde luego no lo tienen.

4. Siempre se recuerda que Europa le debe una (o dos) a los pericos. Pero es el momento de cobrarse otra deuda: la de la final de Glasgow, ante un Sevilla que tuvo que recurrir a los penaltis para batir a un Espanyol en inferioridad numérica. Ahora los blanquiazules juegan otra final, ésta más dramática, ya que en juego está el futuro.

5. Hasta hace un año por estas fechas, Espanyol y Sevilla lidiaban por el sexto puesto en la clasificación histórica. Ahora los hispalenses se han escapado (suman 17 puntos más), pero los pericos están en disposición de demostrarles que son igualmente capaces de derrotarles. Como ya hicieron la temporada pasada en la Copa.

6. “Este domingo, ¡jugamos juntos!”. El lema del Espanyol no puede ser más elocuente: la afición resultará fundamental en la misión de la permanencia. Los pericos nunca fallan. Y, para demostrarlo, ayer mismo se registraron colas en las taquillas de Cornellà. Cada socio tiene a su disposición otra entrada gratis además de descuentos en tickets adicionales. Ya se han retirado más de 3.000. Objetivo, 30.000 espectadores.

7. El Sevilla es el único equipo de las grandes Ligas europeas que todavía no ha ganado a domicilio. En lugar de considerarlo un temor, por ser tradicionalmente ‘aspirina’, se debería afrontar como estímulo: 17 rivales ya han igualado o ganado ante ellos: se dividen en nueve empates y ocho derrotas. Y el Espanyol, sencillamente, no puede ser menos.

8. El Shakhtar espera esta noche al Sevilla. Un partido que puede desgastarles físicamente y obligar a Unai Emery a hacer rotaciones el domingo. Y, aunque disponen de un gran fondo de armario, suplencias como la de Kevin Gameiro resultarían fundamentales. Además, estadísticamente el rendimiento del Sevilla en Liga baja después de jugar Europa League.

9. Se está dando la curiosa circunstancia de que el Espanyol, salvo contadas excepciones como Málaga o Atlético de Madrid, está haciendo en esta segunda vuelta justo lo contrario que en la primera: pierde ante los que había ganado y viceversa. De modo que, dado que en el encuentro del Sánchez Pizjuán hace 19 jornadas acabaron 2-0, el domingo se deberían sumar los tres puntos.

10. El décimo y definitivo motivo es quizá también el más pragmático: el Espanyol necesita sumar estos tres puntos ante el Sevilla para ahorrarse quebraderos de cabeza en las dos jornadas finales. Para evitar ir al Camp Nou amilanado y llegar al partido ante el Eibar en una situación de vida o muerte. Si el Espanyol suma el domingo los 40 puntos, estará salvado.