La Real Sociedad se da un baño de moral en Azkoitia
La afición realista olvida el mal inicio liguero y anima a los txuri-urdían en su sesión celebrada en Txerloia. Moyes, de los más solicitados por los jóvenes.
La afición txuri-urdin está con la Real Sociedad. Lo ha demostrado en la sesión que ha llevado a cabo en el campo de fútbol de Txerloia, en la localidad guipuzcoana de Azkoitia, hasta donde se ha desplazado en autobús la plantilla realista para llevar a cabo su entrenamiento, dentro de esa buena idea que tiene el club donostiarra en los últimos años de acercar a los seguidores de la provincia a sus ídolos.
Ha sido un positivo baño de moral para el vestuario txuri-urdin, que ha visto como su afición parece no tenerles en cuenta el mal arranque liguero que han protagonizado. Los realistas han llegado en autobús hasta Azkoitia y nada mas bajarse ya les esperaban decenas de pequeños seguidores realistas que se han abalanzado sobre ellos para pedirles autógrafos y sacarse fotos con sus ídolos. El técnico, David Moyes, ha sido uno de los más solicitados por los chavales azkoitiarras, que no han parado de pedirle que se sacara fotos con ellos hasta que se ha marchado: sobre el césped, en el túnel de vestuarios, al lado del autobús... El escocés ha respondido solícito y con una sonrisa de oreja a oreja en todos los casos, y ha hecho las delicias de los seguidores. Se ha mostrado como todo un gentleman ingles, educado y afectuoso. Otro de los jugadores más solicitados por la afición de Azkoitia ha sido el actual ídolo local, el juvenil Igor Zubeldia, internacional en su categoría, que este verano ya hizo la pretemporada con el primer equipo a las órdenes de Moyes, y que ya juega en el filial realista. Zubeldia también ha estado sacándose fotos con sus paisanos de forma constante.
Moyes ha dispuesto una sesión intensa sobre el césped de hierba natural de Txerloia y con el tiempo respetando todavía a los txuri-urdín, porque por la mañana no llovía, antes del aguacero vespertino que ha sorprendido a todo Guipúzcoa. Sesión con bastante físico, pero también con el balón como protagonista.
Al término del entrenamiento, y entre el alboroto de los seguidores azkoitiarras, Gero Rulli expresaba la sensación de gratitud de la plantilla donostiarra. "Es la primera vez que disfruto de algo así en la Real, es muy lindo acercarnos a nuestros aficionados, estamos muy agradecidos, hoy ha sido muy lindo ver todo su apoyo, el ánimo de los más pequeños, y mas cuando todavía no estamos siendo capaces de ofrecer lo que esperamos, porque s este patrón pensábamos llegar con más puntos", explica el portero argentino que hacia autocrítica. "Hasta el partido del Málaga estábamos haciendo las cosas casi perfectas, pero en ese partido nos falto intensidad, hicimos errores impropios y tenemos que seguir trabajando para evitarlos, porque si algo hemos hecho bien es ese trabajo defensivo. Hay que hacer autocrítica y mejorar". Rulli no quería tampoco personalizar en los errores del otro día en La Rosaleda. "Entramos los once en la cancha, no solo se equivoca uno, sino que nos equivocamos todos y esos diez minutos fueron catastróficos por todos, y al que piense que fue una cosa de dos o tres jugadores, le digo que está equivocado, porque jugamos todos, por lo que erramos todos".