Bruno y Giovani equilibran esta noche el ‘arresto’ de Pedro León

Será un partido marcado por los ausentes. El Villarreal vuelve a tener demasiados, por lo que no debería ser noticia, pero esta vez parecen determinantes para su objetivo de levantar cabeza (un punto de los últimos nueve). Su columna vertebral, formada por Musacchio, Bruno y Giovani, no estará presente por las dichosas lesiones. El central lleva ya mes y medio fuera de combate. El mediocentro llegó tocado de la Roja, donde dejó huella. Y el mexicano, otra vez, volvió a pagar sus viajes internacionales mientras es el Submarino el que le paga. Los males amarillos compensan los del Getafe, que ha tenido que llamar a canteranos por culpa de las sanciones y de los tocados y que sigue teniendo a Pedro León como centro de su actualidad.

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Esta vez, el murciano vuelve a escena por no haber llegado a tiempo el visado de su ficha debido a la lentitud de la LFP en tramitar esta orden estricta dictada por la justicia. Parece que al menos esta semana, por fin, será más llevadera ya que podría vivir su última jornada de arresto domiciliario. Si el papeleo de Tebas o los planes de Ángel Torres no lo impiden.

Los que están. Sin los pilares, aún habrá vida. El Villarreal recupera a Gabriel y Cani, que no es poco, y podrá tener a Uche (jugó con Nigeria) en el banquillo por si las moscas. Marcelino confiará su ataque a Vietto, que ya le había ganado la partida a Gio a base de goles pero que estaba en un segundo plano por galones. Junto a él, Gerard gozará de otra oportunidad tras tantas ya aprovechadas. Un hueso para Naldo. El objetivo del Villarreal es ser tan serio en defensa como antaño. El Getafe va en serio. Ganó sus dos últimos partidos fuera (Anoeta y Riazor) y sólo ha perdido uno de sus últimos seis (Atlético). En El Madrigal no suele inquietar (dos victorias de 12) pero las únicas veces que ganó, casualmente, fueron las dos últimas.