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Eibar - Real Madrid

Garmendia: “Pusimos el listón alto, esto así era impensable”

Jose Ignacio Garmendia compatibilizó la carnicería con la meta del Eibar. Ningún armero ha jugado más: casi 700 partidos. Lo dejó en Segunda y ahora se frota los ojos...

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Garmendia: “Pusimos el listón alto, esto así era impensable”

—¿Cómo ha visto al equipo desde que está en la élite?

—Muy por encima de lo que pensaba, sobre todo, en la clasificación. Sabía que el equipo estaba hecho, que tenía una forma clara de jugar y competir. Pero me ha sorprendido la rápida aclimatación del grupo, que la mayoría no había jugado en Primera y viene de Segunda B, que en todos los partidos están compitiendo de tú a tú. Tengo una satisfacción plena.

—El del Madrid es un partido histórico.

—Equipo, ciudad y afición están con gran ilusión, con ganas de que llegue el partido y responder ante todo un Real Madrid. Además de para disfrutar la gente del Eibar, debe servir para hacer ver a muchos que ha llegado ahí con sus medios, que sabe estar a la altura, comportarse y ser un buen anfitrión. Es un gran escaparate. No un colofón, pero sí una gran ilusión de muchos años de lucha para llegar a un partido así en Primera. Los que hemos estado dentro sabemos de la dificultad que supone para un modesto llegar hasta aquí. Esto era impensable.

—¿Realmente ve al equipo con posibilidades de sacar un resultado positivo?

—Hasta en el Camp Nou tuvo una hora fenomenal de partido, contra el Atlético estuvo cerca... Tengo esperanza en el partido ante el Madrid, hay que pelearlo y acabar con la cabeza alta. Va a ser una fiesta. El Madrid también está teniendo una semana complicada, toda la gente ha estado jugando por ahí. El césped de Ipurua es bueno, pero el entorno hace que el partido sea siempre bastante complicado. Equipo y afición van a pelear al 100% para complicar la vida al Madrid.

—¿Nos da un pronóstico?

—Me gustaría que el Eibar puntuase hoy. Mi pronóstico es disfrutar, ilusionarse y dar buena imagen en juego, afición y ciudad.

—Siendo una leyenda armera, sentirá un poco de envidia de no poder estar en el campo…

—No, al revés. Intento ver los aspectos positivos de las cosas. Puse mi granito de arena durante 19 temporadas de jugador para que el Eibar estuviese lo más alto posible. Yo llegué en Tercera y al final, después de 19 años, el equipo se quedó en Segunda A. Pusimos el listón un poco más alto y ahora ha venido otra gente que lo ha sobrepasado y está en Primera. Quiero ser partícipe de esa ilusión con la gente que en este momento le está tocando jugar. A mí me tocó jugar en otra época, también gloriosa para nosotros. Quiero disfrutar de ésta porque sé lo difícil que es estar donde están.

—Todavía se recuerda en Ipurua el gol que metió de portería a portería al Pontevedra en 1988...

—Todo el mundo hablaba de ese gol. El portero del Pontevedra era de Azpeitia, Joseba Aranguren. Hacía un día de perros, con mucha lluvia y viento, el campo estaba bastante mal. Le pegué fuerte, botó en un charco y le superó. Fue una situación desconcertante.