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Real Madrid | El perfil

Lucas, de sangre gallega como Amancio Amaro y Paco Buyo

No es la primera vez que tiene la experiencia de jugar con el primer equipo. Mourinho le hizo debutar en 2011 en un amistoso en Oviedo, donde marcó un gol.

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Lucas, de sangre gallega como Amancio Amaro y Paco Buyo

Lucas Vázquez (1991, Curtis, A Coruña) estudia tercero de INEF en la Universidad Camilo José Cela. Lleva la velocidad y el deporte en la sangre desde que jugaba al fútbol con su hermano mayor Mateo (27 años), que ha visto cómo el pequeño Lucas le adelantó por la derecha. Los más veteranos de su pueblo siempre le dicen lo mismo: “¡Tenemos al nuevo Amancio Amaro! Extremo y goleador”. Sus padres, Tino y Carmen, son más cautos. Saben las vueltas que da esto del fútbol, pero no dejan de presumir de un hijo que fue uno de los chavales que mejor sensación dejó ante el Inter.

“Parece tímido, pero es de los que hace vestuario dentro de un equipo. No es el clásico extremo que sólo desborda, sino que también tiene mucho gol”, subraya uno de sus primeros entrenadores en La Fábrica, Juan Vicente Peinado. Lucas aterrizó en la cantera blanca en 2007, procedente del Ural, el mismo equipo de donde salió Paco Buyo. Pensaba que su padre le tomaba el pelo cuando le dijo que el Real Madrid quería ficharle, pero ahora es uno de los bombones de la cantera madridista para muchos equipos de Primera (el Espanyol o Elche, por ejemplo, han preguntado por él).

Empezó a despuntar en Valdebebas la temporada que formó parte del Juvenil A de Toril (2009-10). La temporada anterior tuvo un papel menos importante en aquel Mundialito que el Madrid se llevó ante el Barça y en el que futbolistas como Sarabia u Óscar Plano (procedentes del Juvenil A) le taparon. Lleva tres temporadas en el Castilla y esta última fue el máximo goleador del equipo. Gusta en el actual cuerpo técnico su velocidad y entrega. Fernando Hierro le cuida en cada entrenamiento y no pierde detalle de su progresión. “Este tío va a jugar en Primera muchísimos años, seguro”, opinan dentro del club.

No es la primera vez que tiene la experiencia de jugar con el primer equipo. Mourinho le hizo debutar en 2011 en un amistoso en Oviedo, donde marcó un gol. Frente al Inter tuvo el bonito gesto de firmar un autógrafo a un chaval que saltó al terreno de juego con el partido en juego. La seguridad del estadio se dirigió a por el niño como si fuera un delincuente, pero Lucas aprende de los detalles de futbolistas del primer equipo, como Cristiano, que el año pasado abrazó a un espontáneo en Miami.

Ahora este gallego sueña con convencer a Ancelotti en Los Ángeles. De momento, es el capitán de un Castilla al que podría ayudar a subir de nuevo a Segunda mientras se curte entrenándose con el primer equipo. Aunque como buen gallego sabe que le puede tocar emigrar de nuevo. De momento no piensa en todo eso, sino en verse pronto con su chica, Maca que, como a él pero desde Melilla, le tocó buscarse la vida en Madrid...