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La intrahistoria

4.000 alemanes en Madrid con entrada y unos 1.000 sin ella

El Bayern cerró el pasado viernes 11 abril el proceso de petición de entradas para el Santiago Bernabéu. Volaron al instante, como todas las que pone a la venta la entidad.

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4.000 alemanes en Madrid con entrada y unos 1.000 sin ella

El miércoles habrá en el Bernabéu 4.000 aficionados alemanes y otros 1.000 sin entrada. El Bayern cerró el pasado viernes 11 abril el proceso de petición de entradas para el Santiago Bernabéu. Volaron al instante, como todas las localidades que pone a la venta la entidad. El club recalcó entre los más de sus 200.000 socios que a la capital de España sólo viajen los aficionados con pase asignado desde Múnich por la normativa UEFA. Hay pasión por el equipo bávaro. Ayer, en Braunschweig, a 600 kilómetros al norte de Múnich, en la Baja Sajonia, 1.200 aficionados muniqueses acompañaron al equipo en un partido en el que el Bayern no se jugaba nada, porque el título de la Bundesliga ya se había logrado hace cuatro jornadas. No hay asientos para ver al equipo en los dos partidos que restan en el Allianz Arena y el club ya ha puesto el proceso de solicitud de entradas de cara a la temporada que viene.

Hay optimismo de cara al encuentro del miércoles. El departamento de márketing del club sacó la camiseta: “La Bestia Negra”. Y está funcionando muy bien. En la tienda oficial del club ubicada en la Ciudad Deportiva se han vendido ya unas 1.000 unidades, sin tener en cuenta los pedidos de Internet. Sin los precios abusivos que se dan en España para entrar al fútbol, el Bayern consigue fidelidad en el campo y en las tiendas.

El periódico alemán Die Welt analizaba con sorpresa en sus páginas que para el Real Madrid-Bayern Múnich todavía quedasen localidades a la venta. Recordaban, por ejemplo, la floja entrada del choque ante el Schalke en cuartos de final (65.000 espectadores). Y ponía como ejemplo el partido de ayer del Bayern en Braunschweig: un choque de récord, puesto que el equipo bávaro sumaba 250 partidos seguidos colgando el cartel de “No hay billetes” allá donde juegue.