¿Hasta cuándo va a seguir sin entrenar?

La verdad es que no lo sé.

Dice que ve difícil volver al Madrid. ¿Su apuesta íntima es la Selección?

Para nada mientras esté Luis, al que considero un intocable. Cuando acabe se abrirá una lista de posibles sucesores y la Federación decidirá. Que me gustaría es de cajón; el puesto de seleccionador nos apetece a todos. Pero no digo una palabra más.

¿Por qué cuando habla del Madrid parece hacerlo con un cierto resquemor?

Si tiene usted esa percepción lo lamento, pues nada más lejos de mi intención que lo parezca. No tengo quemazón alguna con el club que me hizo hombre. Otra cosa es que mi opinión no coincida con la de personas que lo dirigieron en su día. A mí me echaron por ser bueno y permisivo con los jugadores; vamos, que no tuve ningún lío con nadie que pudiera haberme dejado eso, una quemazón.

¿Usted ve a Calderón y a Mijatovic echando raíces? ¿No da la impresión de que lo suyo tiene un aire de provisionalidad?

Calderón es el presidente y hay que dejarle trabajar. La provisionalidad a la que usted alude la propicia el ambiente que sigue habiendo en torno al voto por correo, a los estatutos del club. Es absurdo vivir entre vaivenes por algo así. Si hay gente que pide un cambio, pues que se haga. El Madrid debe ser un ejemplo para todos y si por las circunstancias que fueren nos topamos con un problema que causa desunión, resolvámoslo. Por lo demás, y en concreto en lo deportivo, no se les puede acusar de estar parados. El día del Racing observé que quedaban sólo tres futbolistas de mi época: Raúl, Casillas y Helguera. Han fichado veteranos, jóvenes, campeones del mundo, gente de aquí y de allá. Se ha buscado mejorar.

Con suerte diversa.

Pues a mí me preocupa más que el club sea íntegro, eso lo veo más importante que acertar o no en unos fichajes. El socio debe tener la absoluta certeza de que quienes están trabajan para el bien del club y no para el suyo propio. Así, la gente entenderá que se pasen malos momentos.

¿Qué opinión le ha dejado la película Capello, II parte?

Ahora mismo, de una falta de respeto hacia él. Rafa Benítez habló de que había recibido una oferta madridista y si lo dice es que es verdad. Eso, para Capello, es una trastada.

Extraña sabiéndose como se sabe que el elegido es Bernd Schuster.

Pero no hace tanto desde el propio club se dejaba la puerta abierta a la continuidad de Capello si el equipo ganaba la Liga. Mire, Camacho, que todo lo que tiene de temperamental lo tiene de reflexivo, sostiene que el Madrid ha perdido valores y es verdad. El valor de la discreción, por ejemplo. No le puedes poner esa condición a un entrenador que fichaste por tres años hace cuatro días, y tras remover Roma con Santiago. Cuando lo explicas todo en público, cuando no eres discreto, no te queda nada. Me acuerdo de la aura que rodeaba a Raimundo Saporta, que era un genio, un crack. Cuando apareció en el Mundial 82 se tambaleó esa figura forjada en los despachos, en el trabajar lejos de los focos.

Salvo sorpresa, el club camina hacia su cuarto año sin títulos. ¿No habrá quinto malo? ¿Cómo ve el futuro del Madrid?

El club tiene muchísimos recursos para salir adelante, pero entiendo que además de mirar al futuro debe hacerlo al pasado, a sus tradiciones. Y no piense que vivo anclado en el ayer, al contrario. Digo que ahí ha estado la fuerza del Madrid, el buen estilo dentro y fuera del campo.

¿Schuster es el hombre?

Su tarea en el Getafe tiene mucho mérito y puede ser un técnico muy valioso para el Madrid. Estilos hay miles, no existe el perfil único de entrenador. La clave está en que el vestuario funcione y elegir bien los futbolistas.

Con usted Ronaldo funcionó bien.

El Ronaldo que yo conocí era encantador, un seductor dicen que para las mujeres, pero también para los amigos. Un futbolero que con una mirada calaba al compañero, al entrenador Y me consta que le costó irse porque quiere al Madrid y porque es un chico bueno principalmente.

¿Se les fue la mano con la galaxia?

Cuando yo me fui acabábamos de ganar la Novena. Diría que funcionaba

¿Fue más problema no acertar con lo que llegó, Queiroz el primero, que su propia marcha?

Lo malo fueron los modos, la manera como me fui yo y se fueron otros como Fernando Hierro perjudicó al Madrid. Los cambios pueden ser buenos, pues rompen la monotonía, la rutina. Si hay que acabar un ciclo se acaba, pero se hace bien. Hierro salió mal, también Redondo, gente importantísima en el Madrid como puede ser ahora el caso de Roberto Carlos, que ha sido un jugador extraordinario. No cuesta nada hacer las cosas bien.

Cuando en el Barça de Rijkaard se habla de autogestión, ¿le suena? ¿Es la mejor manera de tratar con estos bichos?

La autogestión requiere finalmente de una figura, del señor que entra por la puerta del vestuario y se nota su presencia. Porque también los hay que por más voces que den, llegan y no pasa nada. Rijkaard me cae muy bien. Su manera de ser ha triunfado en un club en el que todo se cuestiona. Frank y la llegada de Ronaldinho superaron la tristeza grande que rodeaba al Barcelona en todos los sentidos. El ordeno y mando está en desuso, incluso con los propios hijos. Un jefe que ayuda, que anima, recoge más frutos que el que lo fía todo a la bronca.

¿A quién ve campeón?

El Barcelona tiene cierta ventaja. Es cierto que ha bajado su nivel de juego, pero mucho más la tremenda presión que desarrollaba en todo el campo en sus momentos de plenitud. Tiene un gran equipo y exceptuando un caso concreto, el comportamiento de la mayoría es correcto, respira compromiso, unidad.

Se refiere a Etoo, claro.

Digo que las declaraciones de Iniesta, de Xavi, de Puyol son ejemplo de respeto y conocimiento de lo que es el Barcelona, tratan de tener mesura, elegancia Giuly, Edmilson, también van por ahí. Esto no significa que el Madrid carezca de esta clase de gente, pues también la tiene.

¿Usted qué haría con Raúl?

Lo que va a hacer el Madrid: respetarle como persona y su contrato. Conservar las tradiciones también pasa por ahí. Raúl, en Inglaterra, hubiera ido a la selección hasta que él hubiera dicho basta. De él me sorprende que haya admitido jugar como un meritorio, a la izquierda, a la derecha, arriba y abajo, siendo quien es.

Los árbitros.

Me da lástima que se opine de ellos. Lo peor que le puede ocurrir a un club es que un empleado hable mal de los árbitros. Una de las cosas que menos me gustó del Madrid fue aquella amenaza de impugnar aquel partido en Montjuïc porque el Espanyol metió su gol después de oírse el silbato del árbitro.

Gol de Dani Jarque, 1-0 final.

Eso es. La simple amenaza me pareció un horror. Una cosa es la libertad para expresarse que tenemos todos y otra hacerlo sabiendo que crearás mal rollo e incluso hasta violencia.

Pero no me negará que al Barça le pitan distinto al Madrid.

No quiero entrar en eso, de verdad. Hablar de los árbitros es de recién llegados.

Es usted un bizcochón.

¿Pero usted ve a Sánchez Armiño diciéndole a un árbitro cómo debe pitar?

Me creo que Gaspart le dijo a Laporta que rompiera la disciplina de voto de la Liga y votara por Villar y no por Gerardo González porque eso le hacía a él vicepresidente de la Española y los favores se pagan. Me creo que el Barça es la única entidad importante que apoya a Villar en todo el universo. Todo eso me creo.

No sé De asuntos de alta política no entiendo; me posiciono en que me molesta que ataquen a los árbitros y sería muy duro con el que lo hiciera.

Tres apuntes: Sevilla, Valencia y Atleti.

Lo del Sevilla tiene un mérito extraordinario, aspira a todo y con buen fútbol.

Perdone, ¿qué es el buen fútbol?

El que consigue que la gente se vaya contenta a casa al final del partido. Y en Nervión pasa eso. El Valencia se apoya en un núcleo de muchos años, con Albelda como abanderado. Cúper, Benítez, Quique ahora, le han dado una personalidad definida y me gusta. Sobre el Atleti digo que está en las mejores manos. Aguirre me gusta y tienen la voluntad de hacer las cosas bien, quizá les falta continuidad en el trabajo.

El Madrid habla de Cristiano Ronaldo, de Kaká, pero nunca de Fernando Torres. ¿Lo vestiría usted de blanco?

Por condiciones, sin duda alguna. Pero esa sería una decisión muy personal, de su parte me refiero. Aquí, cada vez que un chico pasa unos años en un equipo parece que estorba, es una pena. Torres está identificado con el Atleti, le pagan bien Que siga ahí, hombre.

Igual si sale es a Inglaterra, un fútbol que a usted le gusta.

Muchísimo. Me alegra que tres de sus equipos estén en la semifinal de la Champions porque son ejemplares en muchas cosas. Su respeto a la tradición no le ha impedido abrirse y mezclar técnicos y jugadores de fuera hasta dar con esta mezcla estupenda. Inglaterra es magnífica, sí.