Tras una tormentosa temporada de primavera en la NA LCS, se esperaba que Team Liquid hubiese aprendido algo de cara al nuevo split de verano, pero la primera semana ha demostrado que siguen cometiendo los mismos errores.

La administración sigue dando bandazos con la gestión del equipo, que ya nos dejó momentos totalmente desesperados en el anterior split con cambios constantes que no consiguieron mejorar los resultados, pero que al menos consiguieron evitar el descenso de un club que se encuentra en su peor momento.

Ahora siguen igual, sustituyendo de nuevo a Greyson 'Goldenglue' Gilmer a la más mínima oportunidad, y sin que eso haya evitado el 0-2 en su marcador. El AD Carry de la escuadra, Chae 'Piglet' Gwang-Jin, opinó sobre la cuestión en una entrevista con el medio Inven, en la que no tuvo reparos en criticar los principales fallos de equipo en una carta abierta a sus compañeros.

Los problemas de fondo en Team Liquid

"Independientemente de si te enfrentas a la fase de líneas o a teamfights, siempre tienes que pensar unos pasos por delante, pero ellos [Team Liquid] se centran demasiado en hablar de lo que están viendo en ese justo momento", declaró Piglet a Inven. "Y es algo que podría ocurrir porque no entienden lo suficiente el juego, tan pendientes del presente que no piensan en el futuro de las partidas".

Piglet también sostuvo que por este motivo piensa que "los jugadores norteamericanos son demasiado impacientes en comparación con sus equivalentes coreanos". Ya en el pasado split, el actual ADC de TSM, Yiliang 'Doublelift' Peng comentó en el breve tiempo que pasó ayudando al equipo que tenían un fuerte problema de comunicación durante las partidas, y que era una habilidad básica del mundo competitivo en la que debían trabajar.

Piglet también lo cree, asegurando en la entrevista que Team Liquid no es un equipo que cuente con buenas capacidades de Shotcalling además de buenos jugadores. Pero este no es un problema reciente. El año pasado se grabó un documental titulado Breaking Point, hablando sobre el estado decayente del que estaba adoleciendo la formación del club, criticando la caótica preparación de las jornadas y las numerosas disputas interpersonales de los jugadores.