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Para la mayoria de los jugadores profesionales de League of Legends, estar horas pegados a la pantalla no es nada complicado, con sesiones de entrenamiento que pueden extenderse en muchos casos de 6 a 10 diez horas.
Diferente es lo que ha conseguido el usuario Jon 'August Archer' Eimer, entrando en el libro Guinness de los récords tras cumplir su desafío de jugar ininterrumpidamente a LoL durante 72 horas. Eso sí, el Streamer pactó con la organización Guinness un máximo de cuatro horas de descanso para evitar que el proceso afectara peligrosamente a su salud.
La sesión más larga de League of Legends
Puede decirse pronto, pero Jon estuvo preparándose durante semanas para que su cuerpo pudiera enfrentarse a altos niveles de agotamiento sin desfallecer. En total, Jon consiguió más de ocho mil visualizaciones del seguimiento en directo de la proeza, con un pico de aproximadamente 120 espectadores cuando le faltaba poco para conseguir su propósito.
Más allá del propio récord, también recaudó unos 900 dólares, de los cuales ha donado el 72% a la asociación benéfica Extra Life, que ayuda a niños enfermos mediante eventos relacionados con los videojuegos.
English version
For most League of Legends' professional players being for hours in front of the screen is not uncommon at all due to training sessions that can go from 6 to 10 hours.
However, what Jon 'August Archer' Eimer has achieved sets him appart, he entered the The Guinness Book of Records after fulfilling his challenge of playing LoL uninterruptedly for 72 hours. Of course, the streamer agreed with the Guinness organization a maximum of four hours dedicated exclusively to resting to avoid that the process would dangerously affect his health.
The longest League of Legends session
It is easier said than done. Jon was preparing for weeks so that his body could face high levels of exhaustion without fainting. Altogether, Jon accumulated more than eight thousand visualizations, with a peak of approximately 120 viewers toward the end of the run and an average of 40.
Not only did he break the record, Eimer also raised about $648 — the 72% of the donations through the run — for Extra Life, a charity that uses video games to help hospitalized children.
