Un artículo publicado en el revista Proceedings of the National Academy of Sciences señala que las cinco muestras de sedimentos oceánicos, generados por las explosiones de supernovas, encontradas en cinco lugares del mar son una muestra de que La Tierra ha sido rociada con el isótopo de hierro-60 durante decenas de miles de años.

Los científicos encargados de llevar a cabo este estudio confirman que se trata de un hierro "extraterrestre" debido a que es un isótopo radiactivo y tiene una vida media de 2,6 millones de años, y que después de alcanzar los 15 millones de años acabaría descompuesto. De esta forma, se demuestra por qué ningún átomo ha permanecido en nuestro planeta desde que se formase hace 4.600 millones de años, y que cualquier cantidad de hierro-60 procede del espacio.

Se cree que parte del isótopo se debe a explosiones que se pudieron producir hace 2-3 millones de años y 6 millones de años, respectivamente. Además, se han encontrado huellas en capas más profundas de rocas y en la Luna.

En medio de una Nube Interestelar Local

En estos momentos, los científicos han asegurado que La Tierra y el sistema solar se encuentran en una región llamada Nube Interestelar Local, que no tiene un origen claro, según ha informado la Universidad Nacional de Australia.

El material que conforma estos isótopos puede ser un remanente de supernova, pero los investigadores no cree que toda la nube esté relacionada con las supernovas, sino que consideran que es más probable que las partículas de polvo capturaran los núcleos atómicos del 60Fe y que hayan estado situados en está región de universo de esta forma.

Anton Wallner, autor principal del estudio y físico nuclear, señalaba que se necesita más información, pero que "el hierro-60 podría originarse a partir de explosiones de supernovas aún más antiguas y lo que medimos sería una especie de eco"