Cuando más fuerte golpeaba la pandemia de la COVID-19, Italia fue uno de los países más damnificados. De hecho, durante muchas semanas lideró el ráking de naciones europeas con más casos y muertes. España le seguía muy cerca en aquel momento. Sin embargo, tras recuperación y reapertura de ambos países, la situación ha cambiado notablemente. Mientras que España ha vuelto a las cifras del confinamiento, con 1.000 casos diarios y numerosos brotes, en Italia la curva epidemiológica se mantiene estable. Incluso se encuentra en mínimos desde que se desatara la crisis sanitaria. Estas últimas semanas, ha registrado unas 200 infecciones diarias de media, sin repuntes bruscos.

Estos datos evidencian que Italia está controlando mejor que España la propagación del coronavirus. Sin embargo, las autoridades italianas no se relajan y continúan advirtiendo a toda la población que el virus sigue presente y que deben respetar las medidas de seguridad para evitar los contagios.

Diferencias en la gestión de la pandemia

La cierta estabilidad que ha alcanzado Italia se debe a la gestión del país ante la pandemia. Las restricciones en todo el territorio siguen siendo estrictas, pues amplió el estado de emergencia hasta el próximo 15 de octubre para poder seguir implantando las medidas de contención necesarias. En España, en cambio, el estado de alarma finalizó el 21 de junio.

Además, a diferencia de lo que pasa en nuestro país, en Italia el aforo en los transportes públicos, como los trenes o autobuses, sigue estando reducido. Es más, este sábado, el ministro de Sanidad italiano, Roberto Speranza, afirmó que se mantienen las medidas de distanciamiento en los trenes después de que estallase la polémica cuando el Ministerio de Transportes planteara la posibilidad de que se pudieran llenar de nuevo al 100% de su capacidad.

Por último, Italia está muy alerta para controlar los casos importados, ya que la mayoría de sus rebrotes, controlados por el momento, procede de ciudadanos extranjeros. Como consecuencia, prorrogó la obligatoriedad de guardar dos semanas de cuarentena preventiva a los ciudadanos que viniera de Bulgaria y Rumanía. Por su parte, sacó a Argelia de la lista de países no pertenecientes a la Unión Europea que podían acceder a Italia sin justificación de urgencia. De momento, España no está en su “lista negra”, pero seguro sigue muy de cerca la evolución de la pandemia en nuestro país.