Un lleno en los tendidos de la plaza de toros Jorge "Ranchero" Aguilar, en la que ll diestro extremeño Alejandro Talavante fue el triunfador de la 2ª corrida de la feria de Tlaxcala en una tarde en la que estuvo contundente, mostrando el gran momento que pasa cuajando dos faenas diferentes para obtener un total de tres orejas, para salir a hombros. Por su parte El Zapata estuvo variado de capa y con las banderillas pero con un lote con pocas opciones para recibir palmas. Mario Aguilar dejó buenas sensaciones sobre todo con el primero de su lote con el que estuvo firme y en torero, dejando ir los trofeos tras la falla con el acero siendo ovacionado. Los toros fueron dos de Montecristo, bien presentados, con nobleza pero con poca fuerza y cuatro de Barralva, bien presentados variados de juego, destacando el lidiado en segundo lugar.

Alejandro Talavante ante su primero que fue un buen ejemplar de Barralva con clase, inició su labor a la verónica rematando a una mano con un toque muy torero, brindo al respetable para iniciar su labor muleteril por estatuarios para cuajar una faena llena de inventiva y creatividad con sello propio, la faena fue subiendo de intensidad, vinieron las manoletinas sin moverse y al final una estocada en buen sitio fue suficiente para obtener la primera oreja de la tarde.

Con el quinto de la tarde otro ejemplar de Barralva que tuvo una salida alegre al que saludo Talavante con verónicas artísticas, el ejemplar empujo en el peto, ya con la muleta el extremeño estuvo firme y se jugó la vida ya que el toro fue a menos, a base de oficio logro someter a su enemigo para emplear su repertorio de arrucinas, cambiados por la espalda, toreo en redondo que levantaron a la afición tlaxcalteca de sus asientos coreando el torero, torero, al final manoletinas ajustadas y una estocada hasta las cintas para recibir dos orejas y la entrega de la afición que saco a hombros al diestro español.

Uriel Moreno El Zapata con su primero salió a defender su sitio, lució en un quite muy personal que emocionó al tendido, el tlaxcalteca, tomo los palos para dejar tres pares espectaculares al quiebro, ya con la muleta, la disposición y entrega del Zapata no fueron suficientes ante el de Montecristo que fue a menos, por lo que tuvo que abreviar para recibir palmas. Con el cuarto de la tarde, El Zapata salió a por todas, espectacular con banderillas con el par Monumental y otro al quiebro en tablas, ya con la muleta ante un exigente ejemplar de Barralva, le costo trabajo al tlaxcalteca adaptarse logrando algunos muletazos aislados, al final fallo con la espada para ser aplaudido.

Mario Aguilar mostró sitio y madurez sobre todo con su primero, saludo con artísticas verónicas y después un buen quite por chicuelitas, ya con la muleta ante un toro de Montecristo incierto, logro sobre ponerse a base de valor y buen torero, bajando la mano con temple para obtener tandas de mérito, la faena fue subiendo de calidad, al final una estocada un tanto desprendida por lo que el astado tardó en caer perdiendo por lo menos una oreja que ya tenía bien ganada quedando en una ovación. El sexto de la tarde fue el ejemplar que menos opciones dio, complicado y con peligro, aun así el torero de Aguascalientes lo intento jugándose la vida obteniendo algunos muletazos de mérito, desafortunadamente se puso pesado con la espada para escuchar un aviso y ser silenciado.