Te preocupa tu peso, y trabajar muchas horas al día sentado frente al ordenador no ayuda. Para empezar, no levantarse de la silla trae múltiples efectos negativos para tu salud, ya que según estudios como este del European Heart Journal, altos niveles de tiempo sedentarismo se vinculan con la aparición de enfermedades cardiovasculares, la diabetes y la mortalidad prematura. Y con este panorama pocas calorías puedes quemar. Sí, quizás te levantes una vez o dos para tomar un café y estirar las piernas, pero con eso no basta.

Lo efectivo, más que pasar mucho tiempo de pie, es levantarse y sentarse muchas veces. Lo dice un estudio publicado el pasado mes de diciembre en Medicine & Science in Sports & Exercise, en el que los participantes quemaron más calorías y grasa cuando se pusieron de pie con más frecuencia a lo largo de un período de ocho horas (90 segundos cada vez), que cuando estaban de pie en bloques más largos de 15 minutos. En concreto, quemaban 76 calorías más a lo largo del día. Y sus cuerpos quemaron 71 calorías adicionales de media (y alrededor de 7.1 gramos más de grasa) cuando subieron la frecuencia de altibajos, quemando un 20,4% más de calorías.

Según el doctor Emilio Luengo, cardiólogo responsable de Actividad Física del Programa de Empresas Cardiosaludables (PECS) de la Fundación Española del Corazón, “la mayor pérdida de calorías se debe a la simple razón de que la transición de levantarte y sentarte requiere activación muscular y gasto energético. Cuando estás de pie apenas quemas calorías a no sea que realices un ejercicio físico como subir y bajar escaleras”.

Esta explicación está respaldada por un estudio de la Universidad de Pittsburgh (EE UU), que afirma que la diferencia entre estar sentado y de pie es apenas de entre 8 y 10 calorías, insuficiente para perder peso.

No obstante, el doctor remarca que “por mucho que te levantes y te vuelvas a sentar hay parámetros como la glucosa, la insulina o los triglicéridos que apenas se verán modificados debido a la baja intensidad del ejercicio”. Por ello Genevieve Healy y sus colegas, en el estudio publicado en el European Heart Journal anteriormente mencionado, recomiendan sustituir dos horas al día de tiempo de sentado por caminar o correr, ya que se asoció con alrededor de un 11% menos de masa corporal de media. A lo que el doctor añade que “hoy en día el sedentarismo es una plaga y si adoptáramos nuevos hábitos cotidianos como ir andando a los sitios o subir escaleras en vez de coger el ascensor podríamos prescindir del gimnasio y tener una vida más cardiosaludable”. Así que toma nota porque en la oficina también puedes aplicarte el cuento.