El 6 de diciembre de 2003, el mundo del ciclismo español se tiñó de luto con la muerte del ciclista José María "Chava" Jiménez a los 32 años a causa de un infarto de miocardio. El corredor del Banesto, natural del municipio abulense de El Barraco, dejó grandes imágenes para la historia del ciclismo, convirtiéndose en uno de los mejores escaladores del ciclismo mundial a finales de los 90 y comienzos de los 2000, en una carrera que terminó muy pronto a causa de una fuerte depresión que le obligó a retirarse del ciclismo de forma prematura.

La carrera del Chava empezó en 1993 en el equipo donde desarrollaría toda su carrera profesional, el Banesto, aunque sus primeras victorias no llegarían hasta un año después, en 1994, cuando ganó el Memorial Galera, una etapa en la Vuelta a Cuenca y otra en la Vuelta a La Rioja, además de lograr la general de la ronda riojana. En 1995, Jiménez lograría una victoria de prestigio en la Volta a Catalunya tras imponerse en la cima de Boí-Taüll. Al año siguiente, el Chava amplió su palmarés con su victoria en la subida a Urkiola.

1997 sería un gran año para Jiménez, que lograría una etapa y la general en la Vuelta a La Rioja, el campeonato de España en carretera y su primera gran victoria en Los Ángeles de San Rafael en la Vuelta a España, prueba donde se alzaría con el maillot de la montaña. Aunque si 1997 fue bueno para el Chava, 1998 sería aún mejor. El abulense ganó una etapa en la Vuelta a Asturias, otra en Dauphiné y cuatro etapas en la Vuelta a España, todas con final en alto en el Xorret de Catí, Pal, Cerler y las Lagunas de Neila, además de la general de la montaña y el tercer puesto en la general, tras su jefe de filas Abraham Olano el ciclista del Kelme Fernando Escartín.

El Chava también tiene el honor de ser el primero en ganar una etapa en una de las subidas más duras de España: el Alto de l´Angliru. El abulense logró la victoria en esta cima en la Vuelta a España de 1999, donde revalidó por tercer año consecutivo el maillot de la montaña. En el año 2000, Jiménez ganó la Clásica de los Alpes y dos triunfos de etapa en la Volta a Catalunya en Cortals d´Encamp y en La Rabassa, lo que le permitió alzarse con la clasificación general de la prueba. Andorra de nuevo volvió a ser territorio Chava en la Vuelta a España de 2001, con dos triunfos de etapa en las estaciones andorranas de Pal y de Ordino, junto con al logrado en Ezcaray pocos días antes, además de lograr su cuarto maillot de la montaña y el maillot de los puntos. Pocos hacían presagiar que esta sería la última carrera profesional del ciclista abulense.

Tras un invierno algo turbulento y después de realizar la pretemporada en Málaga, Jiménez le dijo a Eusebio Unzué que colgaba la bicicleta tras sufrir una fuerte depresión. El Chava se centró en su familia y se casó en mayo de 2013, aunque la depresión le siguió haciendo mella y en el momento de su muerte se encontraba internado en una clínica psiquiátrica. Un triste final a la historia de un hombre que conquistó como pocos las grandes cimas españolas sobre su bicicleta.

El equipo Movistar (actual patrocinador de Abarca Sports, estructura que en la etapa del Chava patrocinaba Banesto) ha recordado a la figura de su mítico corredor con un vídeo que recoge los grandes momentos del ciclista de El Barraco.