Como en el Tour, Nairo Quintana y Alejandro Valverde liderarán al Movistar en esta Vuelta. Eusebio Unzué, mánager del equipo, asegura que con ambos en el nueve son “más fuertes y peligrosos”. La dupla, segundo y tercero en el podio de París, aspira “a conquistar” la ronda española: “El objetivo está claro, conseguir el título con uno de los dos”. Su primera ocasión para probar, junto al emblemático desfiladero de Caminito del Rey: el Alto de la Mesa, casi tres kilómetros al 9%, con rampas que alcanzan el 15%.

A Valverde le motivan el escenario y la cuesta: “Evidentemente, se trata de una meta que se me adapta bien. Me encuentro con ganas. Veremos cómo se desarrollan los acontecimientos y si entramos en la pomada por la victoria”. Haber logrado ese ansiado cajón en el Tour le aporta tranquilidad: “Me noto bien de piernas y no siento ninguna presión. La Vuelta siempre figuró en mi calendario. Por lucha no quedará intentar mejorar el peldaño del podio del Tour”.

Sobre la bicefalia del Movistar, llevan la capitanía y su relación con normalidad. Nairo: “Los dos miramos a la general, comprobaremos quién falla primero para ayudar al otro”. Valverde: “De partida, compartiremos la responsabilidad. Aunque los primeros finales son algo más propicios para mí, hay otros apropiados para él. Existe terreno para ambos”. El colombiano no oculta su ambición: “Aunque el doblete Tour y Vuelta supone una nueva experiencia, vengo dispuesto a sacar la espina por la caída de 2014”.

Respecto a sus rivales, señalan a un abanico amplio: “Nos mediremos con Froome, Purito, Aru, Nibali, Landa, Van Garderen… El cartel de candidatos resulta impresionante, aparte de típicas sorpresas que suelen aparecer”. Purito se apunta a la llegada de Caminito del Rey: “Cualquier oportunidad de triunfo se procurará aprovechar. La competencia será brutal”. Froome y Nibali desean “coger la forma más ideal en las jornadas menos favorables”.