Froome: “No merezco las faltas de respeto"

-Defina lo que siente al conquistar su segundo Tour.

-Qué puedo decir, se trata de un sentimiento increíble lograr otro maillot amarillo. La carrera ha terminado, sólo queda París. Respondimos durante las tres semanas al desafío. Gracias a mi equipo por cada momento de trabajo, cada pequeño detalle. Les agradezco el trabajo en Alpe d’Huez. Es una sensación extraordinaria, recogemos la recompensa a tanto sacrificio. Hacerlo una segunda vez supone mucho más de lo que imaginaba.

-¿Se encontraba enfermo esta última semana? Dio muestras de debilidad.

-Desde el segundo día de descanso tenía mucha tos y dolor de pulmones, pero no pedí ningún medicamenta. La mitad del equipo padeció pequeños problemas de salud, como resfriados. Yo sufrí en estos dos últimos días, así que superarlos me hace feliz.

-¿Se convirtió la ascensión a Alpe d’Huez en la más dura de su trayectoria?

-Sí, sin duda. En el pasado completé subidas complicadas. Sin embargo, en un momento dado pensé que no podría funcionar. Por suerte, fui a rueda de Poels y Porte, marcamos un ritmo y las diferencias no aumentaron. Me considero un privilegiado por estos ocho hombres del Sky, como si no los mereciera. Pese a que me preocupé, gracias a ellos salvamos el match ball. Yo anduve cerca al límite, cercano a morir mil muertes.

-¿Cómo planificó la ronda? ¿Temió ante los últimos arreones de Nairo?

-Si no hubiera disfrutado de tanta ventaja, la carrera se habría planteado distinta. Quizá habría sido más agresivo en la montaña. No obstante, las cosas salieron como queríamos. Nuestra idea era golpear duro en la Piedra de San Martín, y así se hizo. Nairo venía con la mente fija en los Alpes, y así lo hizo. Me atacó hasta el final. Es un joven con mucho futuro, le respeto por ser agresivo.

-¿Pesó el amarillo?

-No, para nada. Es un honor portarlo, el sueño de todos los corredores y por lo que peleé en los dos últimos años.

-En Alpe d’Huez le volvieron a escupir. ¿Cómo valora esa falta de afecto del público?

-Aunque hubo personas agresivas, el 99% de la gente fue fantástica. Eso es el Tour, miles de aficionados incondicionales para apoyar. Es una lástima que algunos individuos empañen la imagen y maltraten al deporte. No lo merezco, no hice nada malo. Son circunstancias que no restarán felicidad a los Campos Elíseos.

-En L’Équipe, su exdirector en Barloworld Claudio Corti asegura que no esperaba una explosión a los 26 años similar a la de Armstrong o Ullrich.

-En 2008 también afirmó que acabaría en el podio de una grande. Mis resultados desde entonces le han dado la razón. No me gusta que me comparen a esos ciclistas, sé cómo sacaron sus resultados. No me parece un símil justo ni alentador.

-¿Eludió más exhibiciones como la de la Piedra de San Martín para evitar las sospechas?

-No. Si hubiera podido ganar más tiempo, lo habría hecho.

-¿Piensa que con la publicación de sus parámetros o test independientes será suficiente?

-No lo sé. El equipo está contento al compartir mis datos y mostrar transparencia. En los próximos meses podemos aportar más.

-¿Disputará la Vuelta?

-No lo sé. Ya hemos comprobado con Contador cuánto cuesta un doblete, pese a mi cariño especial por esa prueba, donde vi que valía para aspirar a generales.