A la sombra de Nairo Quintana o Rigoberto Urán, los protagonistas del nuevo boom del ciclismo colombiano, muchos jóvenes corredores están viendo cómo se abren para ellos las puertas del ciclismo europeo. Uno de ellos es el prometedor Heiner Parra, que arranca en la Challenge de Mallorca su segunda temporada en el Caja Rural español, año en el que espera confirmarse como el escalador de calidad al que apunta.

Porque, aunque Parra llegaba a Europa tras destacar en las filas del Colombia 472 donde conquistó la etapa reina de la Ronde d’Isard y acabó séptimo en el Tour del Porvenir, el año pasado fue difícil. “Fue complicada la adaptación, hay que acostumbrarse a correr en el pelotón junto a equipos World Tour. Para ello me fijé mucho en compañeros como David Arroyo, porque la verdad es que la forma de correr en Europa es muy diferente”.

Pero esta campaña la encara con mayores aspiraciones. “En Mallorca hay muchos nervios, es el debut en el año, pero las pruebas del viernes y el sábado me van bien. Luego tengo el objetivo de intentar hacer buenas actuaciones en Algarve y Cataluña, donde hay etapas con grandes cuestas que me pueden venir bien”, asegura el menudo escalador (1,60 y 48 kilos) de Sora (Boyacá).

Parra es consciente de que el Caja Rural, que será invitado a la Vuelta, le ha dado la oportunidad de intentar destacar en Europa, como sus grandes referentes: “Corredores como Quintana, Urán… son muchos los ciclistas que están representando a Colombia por todo el mundo. Los ‘escarabajos’, como la gente nos conoce, vuelven a estar en el más alto nivel. Es un orgullo formar parte de ese grupo de colombianos que representamos al país en el extranjero”.