Después de una semana inicial en Andalucía, la Vuelta concluye con cinco etapas por Galicia: la llana de ayer; dos metas en alto, hoy en Monte Castrove y el sábado en Ancares; otra de media montaña, con su final de mañana en Cangas do Morrazo; y la contrarreloj casi nocturna de 9,7 kilómetros que cerrará la carrera el domingo en Santiago. Desde 1993, año en el que la ronda también terminó en Santiago de Compostela con motivo de los actos por el Xacobeo, Madrid siempre acogió la última jornada.

Con los cuatro primeros clasificados en unas diferencias de 2:29, las ascensiones de Monte Castrove y Ancares y la crono de Santiago se presentan como elementos decisivos. Ancares (que recibe el sobrenombre de cima Chava Jiménez en esta edición) impone bastante respeto: 12,7 km al 8,7%, con pendientes por encima del 18%. Pero el pelotón deberá subir antes al Monte Castrove, 7,1 km al 6,6%, con rampas del 15%.

Contador confía en mantener el rojo hasta lo más alto del podio: “Cada día me siento mejor, más cerca del objetivo. Para esta ascensión habrá que estar con el motor a tope y atentos en cabeza, con el respaldo fenomenal de mis compañeros, como siempre”.

Por su parte, Alejandro Valverde, segundo, a 1:36, asume que la diferencia es amplia, pero lanza un aviso: “Se trata de una etapa bonita, con un final que se adapta bien a mis características. No obstante, dependerá de las fuerzas que tengamos, si se controla, si se lucha por la victoria o se adopta cualquier otra estrategia. Por ahora, hay bastante desventaja. Me quedan energías, veremos qué sucede”.

Último intento. Chris Froome, tercero, a tres segundos de Valverde y 1:39 del liderato, tampoco se rinde: “La Vuelta es una gran oportunidad para enderezar la campaña. Me encanta esta carrera. Mis piernas son las que hablan, las que marcan el ritmo y sus sensaciones se transforman en los indicadores de si puedo atacar o el esfuerzo a realizar. Hasta la última línea lo probaré, sin duda”. Purito Rodríguez, más alejado, a 2:29, se envalentona: “Lo intentaré, no me vale acabar cuarto o sexto, aspiro a lo máximo”.