Ni Kyrie Irving, ni Kevin Love, ni JR Smith, ni Iman Shumpert, ni Mo Williams, ni por supuesto Tristan Thompson. Seis ausencias de nivel. Seis jugadores que son (o podrían ser) titulares en los Cleveland Cavaliers, no jugaron esta madrugada en la derrota ante los Memphis Grizzlies (81-91) por lesión, a excepción del disloco Thompson. Demasiada pólvora fuera frente a uno de los equipos más poderosos de la Conferencia Oeste. Y así, es imposible. "Hicimos cosas bien, pero realmente es difícil decir algo de nosotros ahora mismo con tantos jugadores fuera", subrayó un LeBron James que alcanzó los 14 puntos en el pabellón de la universidad de Ohio State, la de los Buckeyes, donde tiene una taquilla con su nombre y del que es muy aficionado.

La falta de estos hombres, es cierto, no deja ver el potencial real de los Cavs para esta temporada. Una fuerza que se presupone letal, pero que hasta enero (cuando vuelva Irving) no mostrará una verdadera dimensión. Una fecha que Mike Conley, expupilo de este centro de estudios, adelanta: "Ellos van a ser un equipo diferente cuando juguemos contra ellos el 28 de octubre, por lo que tenemos que estar preparados", declaró el base, que logró 4 puntos y 9 asistencias.

Por su parte, los Grizzlies siguen invictos esta pretemporada con un balance 3-0 y Marc Gasol de máximo artillero y reboteador, aunque esta vez los líderes en ambas categorías fueron otros. En la primera destacó Zach Randolph. El ala-pívot no envejece, o se niega a ello, y anotó 14 puntos con buenos lanzamientos desde la media distancia. En cuanto al segundo aspecto, el protagonista fue Courtney Lee con 6 capturas a 11 tantos. Y ahora, tras superar a uno de los candidatos al anillo reciben el viernes a otro: los Oklahoma City Thunder de Durant, Westbrook e Ibaka. Casi nada.