Es difícil imaginar por dónde irá encaminado el futuro de los difusos Lakers pero una cosa parece clara: Kobe Bryant seguirá al menos la temporada que tiene firmada (2015-16) en L.A. salvo que sus problemas físicos le obligarán a tomar otro camino. Acaba de pasar por el quirófano por su lesión de hombro y el tiempo estimado de baja (nueve meses) le pone en ruta para estar listo de cara  la próxima temporada, que sería la número 20 para él en los Lakers, con 37 años, y por la que percibirá 25 millones de dólares.

"Ese es el plan", aseguró a ESPN el propio Kobe cuando se le preguntó si contaba con jugar la próxima temporada en los Lakers. Lo hizo en su aparición en el Staples para el partido en el que su equipo derrotó a Chicago Bulls y la franquicia angelina rindió homenaje a Pau Gasol, que jugó por primera vez en L.A. y contra los Lakers con la camiseta de los Bulls. "No presto mucha atención a todo lo que se dice a mi alrededor", aseguró con su coraza habitual un Kobe que aseguró que los próximos meses de rehabilitación le volverán a exigir "mucha paciencia".